Con el ministro del Interior a la cabeza, ayer se reunieron en Minas los jefes de Policía de la Zona Este

Daniel Borrelli: "Le sugeriría a la Justicia tener un poco más de mano dura con los menores"

El jerarca dijo a LA REPUBLICA que se está trabajando «en conjunto con Lavalleja» en varios casos de personas «desaparecidas o ausentes». Por ejemplo y entre otros, el de la joven Leticia Urrutia Travers, de la que se desconoce su paradero desde hace casi  el próximo 3 de agosto  un año.

El ministro aseguró a los medios de prensa en las sierras que el tema de la minoridad actualmente «preocupa mucho al Ministerio». Inmediatamente agregó, «días pasados ya lo dije y hoy lo aclaro, yo le sugeriría a la Justicia tener un poco más de mano dura con los menores. El problema de los menores está complicando toda la labor policial, el aumento de los hurtos, rapiñas y arrebatos, están llevándose adelante mayormente por menores», aseguró el jerarca.

Borrelli señaló que «los menores actualmente no tienen una adecuada internación, no hay lugares en el Iname para tenerlos internados por un tiempo para que se reeduquen y rehabiliten».

Indicó que «muchas veces estos menores son entregados a los padres y el padre del menor muchas veces de la propia puerta de la comisaría toma hacia un lado y el menor hacia otro. Ni siquiera van hacia la casa juntos y creo que ha llegado la hora también de aplicar un artículo del Código Penal que hace muchísimos años que está en éste, que es el de responsabilizar a los padres por la omisión a los deberes inherentes a la patria potestad».

Lavalleja y las personas «ausentes» o «desaparecidas»

Los temas tocados por el ministro  y en los que se está «trabajando firme»  fueron varios, desde el abigeato hasta las cárceles superpobladas, pasando por el tema de la pasta base.

Concretamente sobre el tema de personas desaparecidas en nuestro departamento señaló: «Hay un hecho de un trabajador rural que se dio por desaparecido y que la Policía tiene la convicción que fue asesinado… estamos tratando de resolver el caso con policías de Montevideo en colaboración con los de Lavalleja».

Más adelante y consultado por LA REPUBLICA sobre el caso de la joven Leticia Urrutia Travers, de la que el próximo 3 de agosto se cumplirán 12 meses de su desaparición, indicó: «Yo diría que más que personas desaparecidas son ausentes y en la mayoría de los casos tenemos lamentablemente la convicción de que han sido asesinadas. En el caso de Leticia Urrutia se está trabajando muy duro en conjunto Montevideo y Lavalleja, principalmente se designó a policías para que trabajen en ese caso y en otros delitos graves no esclarecidos aún».

Según pudo saber LA REPUBLICA, el jefe de Policía de Lavalleja, Sidney Ribeiro, tiempo atrás se reunió con la madre de la joven Leticia y «se ha puesto las pilas», tiene la «intención» de poner fin a esta historia de «misterio y suspenso». Este caso «puede destapar una olla muy grande», ejemplificando como «cuando se opera a alguien por algo insignificante y resulta tener cáncer y estar todo tomado», señaló una fuente confiable.

Fuentes policiales muy cercanas al caso aseguraron plenamente ayer a LA REPUBLICA que «hay firmes pistas de que la chica esta viva, hay testigos que aseguran que la han visto. Estamos cerca, hay que tener paciencia».

Beatriz Travers: «El vacío de su ausencia sólo lo sentimos su familia»

Ante la llegada del ministro y en las últimas horas, la madre de la joven, Beatriz Travers, entregó una extensa misiva a este corresponsal en la que asegura que «la angustia y la incertidumbre han hecho del caso una eterna pesadilla». Agrega, «no hay olvido, no hay consuelo, mi objetivo, mi causa, mi lucha como madre en todo este tiempo, tocando puertas, confiando que cada persona que abre su corazón con voluntad, nada es imposible si se logra descubrir lo posible».

Asegura que «todos los días le pido a Dios fuerzas y salud, soy optimista, tengo mucha fe y nada, ni nadie, me va a detener la esperanza de encontrar a mi hija».

La madre se pregunta en la carta que en este caso: «¿Cuál es el misterio?; mi instinto, mi intuición de madre me indican que mi hija necesita ayuda, el próximo 23 de julio cumple 20 años, me pregunto cuál es la barrera, la traba, hay preguntas sin respuestas, hay expedientes de la causa que por momentos avanzan y otros se detienen, ¿será por la burocracia?; pido justicia y verdad».

Finalmente Beatriz Travers señala: «¿Qué es lo que pasa?, ¿dónde está?, ¿cómo está?, ¿por qué su silencio?; tiene miedo… sólo quiero pruebas de que está viva y sana, nada más». *

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