RENUNCIA EN MASA

Renuncian los 34 obispos chilenos tras reunión con el Papa Francisco por los abusos sexuales

Los altos mandos de la iglesia católica en Chile fueron convocados por el sumo pontífice en el Vaticano entre el martes y el jueves de esta semana. La cita era para rendir cuentas sobre el escándalo de abusos sexuales por curas chilenos.

La totalidad de los obispos chilenos presentaron su renuncia ante el Papa Francisco después de mantener distintas conversaciones en el Vaticano entre el martes y el jueves de esta semana.

Un total de 34 prelados tuvieron que rendir cuentas ante Francisco por los graves casos de abuso sexual cometidos por sacerdotes católicos en Chile, sobre todo en relación al caso del obispo Juan Barros, señalado por encubrir al pedófilo Fernando Karadina.

Los obispos anunciaron, por medio de una declaración firmada de forma conjunta y leída por portavoces, que «todos» han puesto «sus cargos en manos del Santo Padre para que libremente decida con respecto a cada uno».

Por su parte, el papa destacó que los prelados habían llegado con una actitud de «plena disponibilidad» para colaborar en la resolución de este grave escándalo, y que todos están dispuestos a poner de su parte para «restablecer la justicia».

Llamado de atención y perdón

Al término del llamado «periodo de discernimiento y encuentro fraternal», Francisco entregó a todos los obispos una misiva en la que agradeció a todos por el «debate franco frente a los graves hechos que dañaron la comunión eclesial y debilitaron el trabajo de la iglesia en Chile en los últimos años».

En dicha carta también se lee que algunos sacerdotes y obispos habían cometido «abusos de menores, de poder y de consciencia» y que la iglesia ha «profundizado en la gravedad de los mismos» y en las trágicas consecuencias que han tenido en la vida de las víctimas.

Francisco recordó frente a los obispos, dijeron los portavoces, que él personalmente pidió perdón a James Hamilton, José Andrés Murillo y Juan Carlos Cruz, tres de las víctimas del sacerdote Fernando Karadima, quien abusó sexualmente de ellos.

Carta de Francisco a los obispos chilenos

A los Sres. Obispos de Chile

Queridos hermanos en el episcopado:

Les quiero agradecer que hayan acogido la invitación para que, juntos, hiciéramos un discernimiento franco frente a los graves hechos que han dañado la comunión eclesial y debilitado el trabajo de la Iglesia de Chile en los últimos años.

A la luz de estos acontecimientos dolorosos respecto a los abusos —de menores, de poder y de conciencia—, hemos profundizado en la gravedad de los mismos así como en las trágicas consecuencias que han tenido particularmente para las víctimas. A algunas de ellas yo mismo les he pedido perdón de corazón, al cual ustedes se han unido en una sola voluntad y con el firme propósito de reparar los daños causados.

Les agradezco la plena disponibilidad que cada uno ha manifestado para adherir y colaborar en todos aquellos cambios y resoluciones que tendremos que implementar en el corto, mediano y largo plazo, necesarias para restablecer la justicia y la comunión eclesial.

Después de estos días de oración y reflexión los envío a seguir construyendo una Iglesia profética, que sabe poner en el centro lo importante: el servicio a su Señor en el hambriento, en el preso, en el migrante, en el abusado.

Por favor, no se olviden de rezar por mí.

Que Jesús los bendiga y la Virgen Santa los cuide. Fraternalmente

Francisco

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