"Piernas café bar" hace furor en Buenos Aires

BUENOS AIRES, REUTERS

 

Ahora, los habitantes de Buenos Aires también tendrán la oportunidad de sentarse en las mesas de un «café con piernas», al haberse inaugurado el primer bar de la ciudad donde la atracción no son ni los expresos, ni las gaseosas, ni los sandwiches, sino las señoritas ligeras de ropa que los sirven.

«Dios mío, acá deberían poner un médico», exclamó Froilán, un jubilado que aprovechó una visita de sus dos hijos para llevarlos a conocer el lugar.

El local –bautizado «Piernas, café bar»– es atendido por siete mujeres de entre 20 y 26 años, y está enclavado en el centro de Buenos Aires, una zona poblada de bancos y edificios de oficinas.

«La idea originalmente la trajeron de Chile. Los dueños vieron la idea, la copiaron exactamente la modalidad de ellos y luego la adaptaron a lo que pide el público porteño», dijo Jonatan, el administrador del local que prefirió no dar su apellido.

La adaptación fue en el vestido: las argentinas atienden las mesas al ritmo de música bailable en ropa interior y unos enterizos de licra semitrasparente, a diferencia de las diminutas faldas que lucen sus pares del otro lado de la cordillera de los Andes.

«Más allá de eso no hay grandes adaptaciones más que los horarios y los productos que se venden. Ellos ofrecen café y gaseosas mientras que nosotros incluimos el alcohol y algunos productos comestibles», explicó Jonatan. «Ahora sí podemos decir que somos una ciudad cosmopolita», bromeó Ariel, un joven que degustaba un aperitivo mientras su vista se perdía entre las meseras. En la calle un nutrido grupo de curiosos miraba incrédulo a través de los vidrios el espectáculo, sin animarse a entrar y consumir los productos que se ofrecen a un precio ni más ni menos caro que en otros lugares, donde las meseras van con la ropa puesta.

«Soy tímida, por eso no me acerco mucho a los clientes», dijo Helena, una de las meseras, quien lucía un pequeño conjunto negro de encaje y un maquillaje que realzaba sus ojos color caramelo.

Los dueños del local, dos empresarios argentinos, también piensan darle otro valor agregado a «Piernas»: ofrecerán el servicio de entrega domiciliaria de alimentos. «El delivery se hará con enterizos negros y rojos pegados al cuerpo, muy lindos», según el admnistrador del comercio.

Por ahora, los afortunados sólo serán los vecinos de tres cuadras a la redonda del bar, pero, después, el servicio se extenderá un poco más, para satisfacer la demanda de otros porteños.*