Alberto Fernández reclama cese del hostigamiento a Cristina Fernández y libertad de manifestación

Desde hace más de 72 horas, militantes de organizaciones sociales, políticas y de estudiantes se mantienen en estado de “vigilia” en las cercanías de la residencia privada de la vicepresidenta, Cristina Fernández, en el barrio La Recoleta de Buenos Aires.

La manifestación es en apoyo a la exmandataria, debido al pedido de condena a 12 años de prisión e inhabilitación para ejercer cargos públicos, que solicitó en su contra la Fiscalía en el juicio por el denominado “caso vialidad”, de supuesto direccionamiento de obra pública.

En las últimas horas, la Policía de la Ciudad de Buenos Aires emprendió contra los manifestantes con gases lacrimógenos y camiones hidrantes, informó la prensa argentina.

En su perfil en la red social Twitter, el Partido Justicialista condenó lo ocurrido. “A Cristina la defiende el pueblo. Contra la provocación de Horacio Rodríguez Larreta, jefe de Gobierno de la ciudad, todos a la plaza de Juncal y Paraná”, expresó el sector político.

Cese de hostigamiento

Por su parte, el presidente de la Nación, Alberto Fernández, se expresó a través de su cuenta social Twitter pidiendo el imperioso cese del hostigamiento a la vicepresidenta y garantizar el derecho a la libre expresión y manifestación de los ciudadanos y ciudadanas.

Fernández dijo que este sábado “el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires dispuso desplegar un operativo policial con vallas que impedían la libre circulación en las inmediaciones del domicilio de la vicepresidenta de la Nación”.

“Es imperioso que cese el hostigamiento a la vicepresidenta y garantizar el derecho a la libre expresión y manifestación de los ciudadanos y ciudadanas, pidió el mandatario.

Asimismo, exhortó a la dirigencia opositora que “cesen las expresiones provocativas y violentas y permitan que todos los actores se expresen responsablemente para garantizar la paz social”.

Días pasados, Cristina Fernández manifestó: «Lo único que le faltaba a Rodríguez Larreta para ser Macri: la policía de la ciudad reprimió con palos, gas pimienta y gases lacrimógenos a ciudadanos y ciudadanas que se acercaron a Juncal y Uruguay como muestra de apoyo frente a los insultos de un grupo de energúmenos macristas».

Agregó: «Jamás, ningún militante ni simpatizante de nuestro espacio político ha ido al domicilio de ningún dirigente macrista a insultarlos. Ni a la casa de Macri, ni a la de Rodríguez Larreta, ni a la de Bullrich o Vidal».