Legisladores del PN descontentos con el juicio político contra Cosse. Argimón se enteró por la prensa

La semana pasada, un grupo de ediles y edilas de la coalición multicolor en la Junta Departamental de Montevideo (JDM) aprobaron enviar a la Cámara de Senadores el pedido para que se vote un juicio político contra la intendenta de Montevideo, Carolina Cosse, aduciendo supuesta falta de transparencia en la administración capitalina.

Se necesitan al menos dos tercios de votos positivos en la Cámara Alta para que Cosse sea destituida de su cargo, una acción parecida a lo que en otros países se entiende como impeachment. 

El senador del Partido Nacional, Sergio Botana, dijo al diario El País que “deberá tomar su tiempo para analizar los aspectos legales y sopesar cuestiones institucionales y políticas” pero, sobre todo, “la magnitud del desvío no parece ameritar la consecuencia política que prevé el juicio político”. 

“Comprendo la impotencia de los ediles ante la falta de respuestas (…) con Diputados sucede lo mismo, pero habrá que estudiar mecanismos para defender la cristalinidad, el derecho a la información y no desembocar en la inestabilidad política”, agregó.

El mismo medio consultó a otro legislador -que optó por no decir su nombre-, quien calificó el intento de juicio político como “una barbaridad” y “una locura”, cometida por “ediles que se cortaron solos” y que tomaron por sorpresa al Partido Nacional incurriendo en lo que entiende es “un error de apreciación política”. 

El mismo legislador prevé un efecto adverso a lo que pretenden los ediles: “Le dieron vida a Cosse y al Frente Amplio”. 

Otro dirigente ve el juicio político como una “bala de plata”, o sea que es “un solo tiro” que no tiene segundas oportunidades. 

“Una medida extrema”

Por su parte, la vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón, dijo este martes que el intento de juicio político contra Cosse es “una medida extrema” y que se enteró “a través de los medios de comunicación”.