¿Han conseguido más derechos las mujeres en Qatar en los últimos años?

En el pasado, las mujeres en Qatar tenían poca participación en la vida pública y se les negaban muchos derechos básicos, incluyendo el derecho a votar y presentarse como candidatas en elecciones políticas. Sin embargo, en el año 1999 se aprobó una ley que otorgó a las mujeres el derecho a votar y a ser elegidas para cargos políticos, lo que marcó un importante cambio en la sociedad qatarí.

A pesar de este avance, las mujeres en Qatar siguen enfrentando desigualdades en ámbitos como el empleo y la educación. Según un informe del Banco Mundial, la tasa de participación laboral femenina en Qatar es del 23%, mientras que la tasa de participación masculina es del 85%. Esta brecha de género en el empleo se debe en parte a las normas culturales y sociales que siguen existiendo en Qatar, que limitan la capacidad de las mujeres para acceder a ciertos trabajos y avanzar en sus carreras.

En cuanto a la educación, las mujeres en Qatar tienen acceso a una educación gratuita y obligatoria hasta los 18 años, pero aún existen desigualdades en cuanto a la calidad de la educación que reciben las niñas en comparación con los niños. Además, las mujeres en Qatar todavía enfrentan obstáculos para acceder a ciertas carreras y programas educativos en la universidad, lo que limita su capacidad de desarrollarse profesionalmente.

Otro de los desafíos que enfrentan las mujeres en Qatar es la discriminación en el ámbito familiar. Según la ley qatarí, las mujeres no tienen los mismos derechos que los hombres en cuestiones relacionadas con el matrimonio, el divorcio y la custodia de los hijos. Además, las mujeres en Qatar todavía se enfrentan a la práctica de la poligamia, aunque está prohibida por la ley.

A pesar de estos desafíos, las mujeres en Qatar han logrado avances significativos en los últimos años y han demostrado su determinación y su capacidad para superar las barreras que se les presentan. En el año 2015, la primera mujer en Qatar fue elegida como miembro del Consejo Consultivo, el órgano legislativo del país.

La niqab, una pared entre las mujeres y el mundo

La niqab es un tipo de velo que cubre la cara y el cuello de una mujer, dejando solo una abertura para los ojos. Se usa principalmente en países del mundo árabe y en algunas comunidades islámicas, y se considera una forma de modestia y recato en el vestir. La niqab es diferente de la hijab, que solo cubre el cabello y el cuello de una mujer.

La palabra “niqab” proviene del árabe y significa “máscara”. La niqab se lleva generalmente sobre un hijab, una capucha o un pañuelo que cubre el cabello, y se ajusta alrededor del rostro con el fin de ocultar todo el rostro, excepto los ojos. Se suele llevar con ropa de color oscuro y puede ser confeccionada con una variedad de materiales, como algodón, seda o poliéster.

La niqab es un tema controvertido en muchos lugares del mundo, y su uso ha sido objeto de polémica y debate en cuestiones relacionadas con la libertad de expresión, la discriminación y la seguridad pública. En algunos países, el empleo de la niqab está prohibido en espacios públicos, como escuelas, universidades y oficinas gubernamentales, mientras que en otros sitios se permite su uso libremente.