Fiorella Fleitas es Miss Uruguay

El «Scouting» comenzó hace tres meses en una recorrida por todo el Interior del país buscando a las 16 uruguayas más lindas que fueron seleccionadas entre 600 participantes que se presentaron a las pruebas. Cuando encontraron a las finalistas se trabajó intensamente durante un mes chequeando sus aspectos emocionales e intelectuales.

Angel Cairo, coordinador general del evento, dijo que en la selección se busca un conjunto atractivo. «Las cualidades en una miss son un conjunto entre lo físico y lo intelectual. Nosotros nos fijamos en la combinación entre el color de pelo y la piel, un rostro atractivo, no menos de 1.70 de estatura y un físico curvilíneo, las queremos delgadas pero con formas», explicó.

El jurado estuvo integrado por representantes de los ministerios auspiciantes, la princesa Laetitia D’Arenberg, el director de TVeo, Ramiro Rodríguez Villamil, además de distintas personalidades relacionadas con la moda y la alta costura. En una mesa cerca de la pasarela principal estaban como invitadas especiales las elegidas del año: Miss Paraguay y Miss Bolivia.

Las pasadas fueron cuatro y la última se repitió a pedido del jurado. La primera fue en traje de baño, en la segunda las chicas lucieron ropa de cuero de una línea alemana y en la tercera trajes de fiesta de diseñadores uruguayos.

Fiorella Fleitas fue la ganadora, tiene 20 años, un metro ochenta de estatura, es hija única y vive en Canelones desde que nació. Dijo a LA REPUBLICA que se presentó al concurso por la insistencia de su familia y amigos. No tiene novio y adora comer comida china.

«No sé qué es lo que motiva a una mujer a presentarse a un concurso pero en mi caso hubo distintos factores que incidieron. Para mí esta es una oportunidad como pocas en la que tengo el privilegio de representar a mi país en lo que va a ser la elección de Miss Universo y eso es muy importante. Además la experiencia que seguramente voy a tener me va a servir para mi crecimiento personal. La gente y las amistades que puedo llegar a hacer son otro factor que me impulsó a presentarme. Llegué a la preselección luego de que gané el galardón de vicerreina de Ciudad de la Costa. Uno nunca sabe qué le va a deparar la vida, pero por el momento mis expectativas apuntan a comenzar con mis estudios en la Facultad de Medicina. Mi gran sueño es lograr el título de fisioterapeuta y trabajar en la recuperación muscular de discapacitados», señaló. Aunque la decisión fue propia sus padres la apoyaron desde el comienzo. «Nunca me sentí la más linda de todas las que nos postulamos, además quien vivió las distintas instancias y los ensayos sabe que se establece una relación de amistad y de compañerismo muy fuerte entre todas.

Es difícil hablar de competencia cuando hay cariño. Tan cierto es lo que te digo que para mí fue una gran sorpresa ser la ganadora porque ni siquiera me lo imaginaba».

Las finalistas dedicaron varias horas al día al arreglo personal y al aprendizaje del andar en la pasarela para el momento de la elección. «En los ensayos nos marcaban los errores y trataban de enseñarnos a caminar. Nos hablaban y nos tomaban las medidas.

A mí me decían que tenía que mirar hacia delante, sin mirar el piso.

Yo soy tímida e incurría en ese error, pero por suerte pude superarlo».

En la última pasada la reina lució un vestido strapless negro con encajes y transparencias de la diseñadora Susana Bernik. «Sin duda que cuando escuché mi nombre como ganadora no lo podía creer y estaba abrumada por la emoción y por los nervios, pero sé que una cara bonita no lo es todo en la vida, creo que la inteligencia se demuestra obrando». *