«Más tarde o más temprano los vamos a encontrar», dijo Errandonea sobre los desaparecidos

La esperanza nunca se desvanece para Ignacio Errandonea, miembro de Madres y Familiares Desaparecidos. Con convicción y fe, confía en que algún día, «más tarde o más temprano», sus seres queridos serán encontrados. A medida que se acercaba la Marcha del Silencio, un evento que se celebraría en varias ciudades del país, Errandonea expresó su deseo de justicia y memoria para aquellos que aún están desaparecidos.

En medio de la multitud y momentos antes de la marcha, Errandonea compartió sus pensamientos: «Seguimos año tras año reclamando lo mismo: ¿dónde están nuestros familiares? Lo hacemos por memoria y justicia». Sus palabras reflejaban una lucha incansable, una búsqueda de respuestas que se ha prolongado a lo largo de los años. Sin embargo, no pierde la esperanza y confía en que el gobierno preste atención a este reclamo popular, tomando medidas y exigiendo a las Fuerzas Armadas que revelen la verdad sobre el paradero de sus seres queridos.

En un país democrático, resulta difícil comprender por qué tantos años han transcurrido y aún hay familiares que permanecen secuestrados en la incertidumbre. Errandonea no puede evitar cuestionarse esta situación y anhela que finalmente se haga justicia. Para él, la participación de los jóvenes en esta causa es motivo de emoción y tranquilidad. Reconoce que el tiempo puede estar en su contra, pero encuentra consuelo en la idea de que, con la valentía y determinación de la juventud que ha tomado la bandera de esta lucha, tarde o temprano, lograrán encontrar a aquellos que aún buscan.

En medio de esta búsqueda eterna, la Marcha del Silencio se convierte en un momento de unión y solidaridad. Una multitud se congrega, una marea de personas que claman por la verdad y la justicia. Es un encuentro donde las voces se hacen eco y las lágrimas silenciosas se derraman, recordando a aquellos que aún están desaparecidos. Esta marcha, cargada de simbolismo, es un recordatorio de la lucha constante de los familiares y su demanda incansable de respuestas.