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Penadés tras las rejas: Sus primeros días en prisión preventiva tras ser acusado por 22 delitos sexuales

El exsenador del Partido Nacional está ahora descontando una prisión preventiva luego de ser imputado por 22 delitos sexuales relacionados con menores de edad. Así son sus días en la celda y su distancia con el otro imputado, Sebastián Mauvezín.

Gustavo Penadés en una foto de archivo junto a legisladores correligionarios del PN, como Gloria Rodríguez.
Gustavo Penadés en una foto de archivo junto a legisladores correligionarios del PN, como Gloria Rodríguez (a su derecha).

El exsenador del Partido Nacional, Gustavo Penadés, enfrenta un período de prisión preventiva en la cárcel de Florida, imputado por 22 delitos de explotación sexual de menores y violación, entre otros. Su ingreso al sistema penitenciario ha generado un interés particular debido a su perfil público y a la naturaleza de los cargos que enfrenta.

Desde su ingreso, Penadés comparte el módulo con otros siete reclusos en prisión preventiva. La cárcel de Florida se distingue por permitir a los presos andar libremente por los módulos, una característica peculiar en comparación con otras instituciones penitenciarias.

Otro aspecto inusual de la cárcel de Florida es la participación de los presos en actividades de campo. Esto incluye trabajos agrícolas que Penadés también realizará en los próximos días. Además, se les permite a los reclusos tener objetos personales, como colchones y ropa, dentro de la prisión.

Penadés se lleva bien con otros compañeros de módulo

A pesar de las circunstancias, el relacionamiento de Penadés con sus compañeros de módulo ha sido descrito como “correcto”. Dado el espacio compartido en el módulo, existe un contacto diario entre los presos, lo que facilita la interacción.

La rutina diaria en la cárcel comienza a las 7:00 de la mañana con el desayuno en el comedor, seguido de la distribución de medicamentos si es necesario. Luego, los operadores carcelarios inspeccionan que las celdas estén ordenadas y las camas estén hechas antes de que los reclusos salgan a trabajar en la quinta. Tras un almuerzo servido a las 12:00, continúan con actividades en la quinta, ejercicios o talleres. Por la noche, cena un guiso que incluye verduras, carne de vaca y pollo.

Al llegar a la cárcel, Penadés mostró su deseo de comprar siete colchones para sus compañeros de módulo, pero las autoridades penitenciarias se lo impidieron. En la prisión, los reclusos suelen tener sus propios colchones, y no se espera que realicen donaciones de ese tipo.

Penadés comparte el centro penitenciario con Alejandro Astesiano, ex jefe de seguridad del presidente Luis Lacalle Pou. A pesar de sus problemas de salud, que incluyen una cardiopatía y diabetes, la Justicia denegó su solicitud de cumplir la prisión preventiva en su domicilio. Según el ministro del Interior, Luis Alberto Heber, Penadés es tratado como un “preso común” y no recibe ningún privilegio especial.

Las celdas en la cárcel de Florida tienen un tamaño de 12 metros cuadrados y están equipadas con espacio para seis personas, baño individual, estanterías, zapateras y cortinas fabricadas en talleres de la prisión. Los reclusos tienen acceso a duchas con agua caliente de uso común y una televisión en el comedor. Las visitas son permitidas durante los fines de semana para todos los internos, excepto para aquellos bajo prisión preventiva, cuyas visitas se programan para los miércoles.

Si tiene buen comportamiento, Penadés podrá trabajar en el cultivo de alimentos después de las dos semanas. Diversos medios también reportan que se ha constatado que mantiene una distancia fría con el otro acusado de la causa, el exprofesor de Historia del Liceo Militar, Sebastián Mauvezín. A este último se le acusa de haber sido el nexo entre Penadés y los menores denunciantes.

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