¿final feliz?

Compensación histórica: Bayer (Monsanto) condenada a pagar US$2250 millones por riesgos de salud inadvertidos del glifosato

Impresionante fallo judicial. La demanda la interpuso John McKivison. Es por el efecto cancerígeno atribuido al agrotóxico Roundup de su subsidiaria Monsanto. La empresa pretende apelar la decision, pero el fallo no deja de ser histórico, ya que nadie hoy se atreve oficalmente a decir lo que en verdad causa este veneno en las personas y el planeta.

Usuarios de glifosato rociando un campo con dicho veneno. Imagen ilustrativa
Usuarios de glifosato rociando un campo con dicho veneno. Imagen ilustrativa

El glifosato es un herbicida no selectivo, es decir que se usa para eliminar a la mayoría de las plantas o “malas hierbas y plagas”. Se emplea comúnmente en el proceso de preparación del campo antes de la siembra, para la limpieza del terreno, y es el más utilizado a nivel mundial, generando millones de dólares por sus ventas.

BayerMonsanto enfrenta un revés judicial debido a los efectos del glifosato asociados al cáncer. En esta ocasión, la empresa ha sido condenada a pagar 2.250 millones de dólares a un hombre que asegura haber desarrollado «linfoma no Hodgkin» debido al uso del agroquímico durante dos décadas en su campo.

El jurado popular falló a favor de John McKivison, de 49 años, quien había empleado el producto Roundup de Monsanto. Cabe recordar que esta empresa de herbicidas fue adquirida por la multinacional Bayer en 2018.

El veredicto fue unánime, declarando a Bayer y Monsanto culpables de negligencia y de no advertir adecuadamente a los usuarios sobre los riesgos asociados al herbicida.

En respuesta a la sentencia, la multinacional ha anunciado su intención de apelar el fallo, considerándolo «excesivo». Además, señalan que el veredicto «contradice el abrumador peso de la evidencia científica y las evaluaciones científicas y regulatorias a nivel mundial» sobre el Roundup.

El riesgo asociado al uso del glifosato en el herbicida Roundup

En 2020, la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos concluyó que «no existen riesgos preocupantes para la salud humana cuando el glifosato se utiliza de acuerdo con su etiqueta actual» y que «es poco probable que el glifosato sea un carcinógeno humano».

La Comisión Europea, el año pasado, afirmó que «según una evaluación de toda la información disponible, actualmente no hay evidencia que clasifique al glifosato como cancerígeno».

Glifosato, dicamba, glufosinato, 2,4-D y ocho herbicidas del grupo ariloxifenoxipropionato son los venenos a los que es resistente la nueva semilla transgénica de Bayer-Monsanto. Imagen Ilustrativa.
Glifosato, dicamba, glufosinato, 2,4-D y ocho herbicidas del grupo ariloxifenoxipropionato son los venenos a los que es resistente la nueva semilla transgénica de Bayer-Monsanto. Imagen Ilustrativa.

Aunque la Agencia Reguladora del Manejo de Plagas de Health Canada aprobó su uso, la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la Organización Mundial de la Salud determinó en 2015 que el glifosato es «probablemente cancerígeno para los humanos».

Las demandas contra Bayer superan los 10.000 millones de dólares

En 2020, Bayer accedió a pagar alrededor de 10.000 millones de dólares en un acuerdo con decenas de miles de demandantes que alegaban que Roundup causaba linfoma no Hodgkin, sin admitir culpa.

Sin embargo, desde entonces, nuevas demandas han continuado surgiendo con resultados diversos: la compañía ganó un caso el 22 de diciembre en California, pero perdió uno el 5 de diciembre en Pensilvania y otro el 17 de noviembre en Missouri, según informó la empresa.

Al final, la gran pregunta es si las sociedades están dispuestas a seguir esperando (o fingir demencia) hasta que ya se hayan perdido demasiadas vidas por este tipo de enfermedades y derivados, hasta que el monocultivo y los transgénicos junto con el uso de glifosato y demás venenos que dicen «cuidan» la producción de alimentos reales hayan arruinado toda la tierra fértil y su equilibrio natural al no respetar sus ciclos naturales de vida y descanso y su equilibrio único llevado a cabo por su propia biodiversidad (la cual se está perdiendo en todos los niveles y a nivel mundial cada año en escalas más grandes).

¿Hasta cuando decidimos tolerar la negación de que este impresionante veneno que genera tantas ganancias para el mercado alimenticio lo hace a costa de afectar gravemente la salud y calidad de vida en todo el planeta? solo el tiempo lo dirá.

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