Piriápolis fue una película. Finalizó la 13ª Edición de cine

Terminaba así la 13ª Edición de Piriápolis de película, y llegaba la hora del balance. La oportunidad de ver  cada noche una film como “El virus del miedo” el viernes de noche,  del realizador español Ventura Pons  o “El legado”, de “Pino” Solanas el sábado y poder conversar con los directores a la mañana siguiente es uno de los logros de este festival,  porque pone en contacto al director con  los periodistas pero también con su público, en un espacio abierto y sin tensiones.

Ventura Pons, con Ricardo Ramón, director del Centro Cultural de España, haciendo de interlocutor,  les brindó a los  presentes un paseo por los años 70 /80 cuando el destape, luego de la muerte de Franco, creo las condiciones para una efervescencia  cultural contagiosa, estimulante, rica en producción y en imaginación.

Sus recuerdos de Dalí, y en especial de su casi ignorada hermana, ambos residentes de Cadaques, a dónde pasa largas temporadas el mismo Ventura Pons,  hicieron del encuentro otra película  que  espera ser filmada.  Una idea  del director nos queda rebotando, palabra más, palabra menos, dijo: “Antes del Mercado Común, estábamos todos enteradísimos de lo que pasaba en el cine de Francia, o  de Italia. Ahora que estamos unidos solo conocemos el cine comercial. Solo Francia mantiene un cine propio y lo defiende”. La humanidad, como el cangrejo, parece que avanza yendo para atrás, a veces.

La magia de la creación

Fernando “Pino” Solanas, llenó la sala. Se refirió al a magia de la creación, a la imposibilidad de llevar al pie de la letra un guion  sin dejar espacio a la improvisación, y contó los pormenores de una de las escenas del cine más aplaudidas, en su film “Tangos, el exilio de Gardel“, cuando en medio de la noche, entre la neblina, aparece la figura del “mudo”. Y confesó que en su lugar tenía preparada una  coreografía con dos bailarinas rubias que representarían “Rubias de New York”  y a último momento suspendió todo para dejar solo, en la madrugada,  al más grande cantor del Río de la Plata.

Después de estos deleites, y cuando ya la conferencia de prensa se había levantado alguien  tiró el balde de agua  y le preguntó cómo entendía que Perón tuviera tan buena relación con los nazis. El debate se multiplicó al infinito. “¿Cómo se explica si era nazi que tuviera los primeros ministros judíos que hubo en Argentina? ¿Por qué se instaló, en esa época la comunidad judía más importante de América Latina?” repreguntaba  un hombre que llega a Perón por el compromiso con su pueblo en momentos de dura represión, que fundó con Octavio Getino y Gerardo Vallejos “Grupo Cine Liberación”, que salió a filmar lo que pasaba en el país en “La hora de los Hornos“ y a luchar contra la opresión con una cámara como arma y siguió con su proyecto clandestino, perseguido y asediado por la dictadura de turno, con “Los Hijos de Fierro”.

Mucho más hubo en este festival como para reseñarlo en pocos líneas, el breve curso para romper  el hilo del director argentino Javier Olivera, la película del hijo de Pino, Juan Solanas, que anuncia que su tercer largometraje lo filmará en Uruguay,  la posibilidad de ver “La larga noche de Francisco Sanctis” de Andrea Testa y Francisco Márquez, ganadora de BAFICI, los apasionantes  films de FANTAPIRIA, la original selección de Cine Inusual, el Festival al Este del Plata, la muestra Otrocampo, los cortos  premiados  del 44º Festival de Huesca,  y  finalmente, como broche de oro la presencia de Soledad Silveyra, siempre espléndida, y los cortos en competencia cuyos resultados adjuntamos.

Se apaga la luz.  Queda dibujado en el atardecer el maravilloso marco del Hotel Argentino, las palabras del Intendente  felicitando a Jorge Jellinek y Gustavo Iribarne por animarse a salir con esta iniciativa en el 2003, cuando apenas empezábamos a salir de la crisis, las de Martín Papich, dichas la pasar, en un pasillo,  imaginando un Piriápolis sede del cine uruguayo, las de Olivera: hay que animarse. Las charlas de desayuno donde Roxana Blanco cuenta de la obra “Barranca Abajo”, de Florencio Sánchez y  Verónica Perrota comenta la obra dirigida por Denevi. Cine, teatro, actores, directores, periodista,  atardeceres, sensibilidad y arte.  Eso es Piriápolis de Película

Premios

Se realizó la entrega de premios en la Competencia de Cortos dentro del 13° Festival Piriápolis de Película, que se realizó del 12 al 14 de agosto en el Argentino Hotel de Piriápolis.

El jurado internacional integrado por el realizador Juan Solanas (Francia/Argentina), el realizador y especialista Paulo Pécora (Argentina) y el distribuidor y productor Gabriel Massa (Uruguay), resolvió premiar al corto brasileño El nombre del día, realización de Marcelo Quintella. Como Mejor Corto Nacional el jurado distinguió a la realización Mejores amigas, de Martín De Benedetti, producido por la ECU (Escuela de Cine del Uruguay).

Hubo además una Mención Especial para la producción colombiana Desayuno en Tiffany, de Andrés Molano Moncada y un reconocimiento para Estribillo, del español César Tormo.

Hubo además Menciones para los cortos uruguayos Amort, de Agustín Fernández y A sus ojos, de Vanesa Guala, ambos producidos por la ECU.

También hubo premios otorgados por un jurado estudiantil integrado por Milagros Fernández, Natalie González y Daniel Dalmas, alumnos de la Licenciatura de Lenguajes y Medios Audiovisuales de Playa Hermosa.

Como Mejor Corto fue premiado Desayuno en Tiffany, y como Mejor Corto Nacional resultó elegido Cuento de medianoche, de Félix Pérez, producido por la ECU.

El jurado estudiantil, otorgó además una Mención a l fotografía del corto brasileño El nombre del día, y dos Menciones especiales para Normal, del venezolano Vadim Lasca y para el corto mexicano Las peores cosas, de Paco Ríos.

Los dos cortos premiados por el jurado internacional fueron seleccionados por el Festival Al Este del Plata, que tendrá lugar el próximo mes de octubre en Buenos Aires. Además recibieron vouchers para locaciones y estadía por parte del Argentino Hotel de Pirápolis.