ENSEÑANZA

Sindicatos de la educación denuncian “presión” para promover a los alumnos

Pocos días después de conocerse las cifras que representan el mínimo histórico de repetición en primaria, la FUM declara que existen presiones por parte de las inspecciones para mejorar los números.

Foto con fines ilustrativos.
Foto con fines ilustrativos.

El jueves pasado, el Consejo de Educación Inicial y Primaria (CEIP) publicó los datos sobre la repetición en los ciclos escolares en primaria, que revelaron que en 2015 se alcanzó el mínimo histórico de 5,05% de repetición.

Irupé Buzzetti, directora de Primaria, festejó la cifra y aseguró: “en la educación no hay magia, hay resultados de una intervención sostenida con buenos dispositivos y programas y la colaboración constante de los maestros”. Asimismo, destacó que las gráficas “son contundentes” y muestran una caída constante de la repetición desde 2005, cuando el porcentaje de repeticiones se ubicaba en un 8,05%.

Cuando asumió el cargo, Buzzeti dijo: “hay que hacer recortes” y propuso un sistema en el que la repetición solo esté permitida en tercero y sexto de escuela, para hacer un seguimiento más extenso del estudiante separar primaria en dos ciclos. Esta es una de las medidas que se incluye en el marco de nuevas formas de evaluación.

Por su parte, tanto la ministra de Educación y Cultura, María Julia Muñoz, como el presidente de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), Wilson Netto, creen que la repetición no es una herramienta pedagógica útil, según Uy Press.

 La opinión de los sindicatos de la educación

En la Federación Uruguaya de Magisterio (FUM) también se entiende que la repetición no es una metodología de enseñanza útil, pero que debe ser aplicada solo “cuando sea necesario”, según lo dicho por su presidenta, Elbia Pereira.

De todas formas, el sindicato se mostró en contra a las declaraciones de Buzzetti y explicó que, aunque la aplicación de ciertos programas contribuyó al descenso de la repetición, también existe una fuerte presión desde las inspecciones para que los números caigan.

«La baja repetición tiene que ver con una política que lleva adelante el CEIP y que la aplica de varias formas. Por un lado está el diseño de herramientas de ayuda y acompañamiento, ya sea el maestro comunitario o el maestro de apoyo”, admitió Pereira en declaraciones a El País.

“Pero por otro, también está el maestro de clase que tiene que hacer malabares para hacer que el alumno aprenda lo mejor posible y los mandos medios que en el entendido de que las cifras deben descender orientan al maestro de clase para que esto suceda», precisó Pereira.

En la misma línea, Luis Martínez, de la Asociación de Docentes de Educación Secundaria (ADES) Montevideo, advirtió que “existen presiones” por parte de los inspectores para que se promuevan alumnos y explicitó que ya se presentaron denuncias sobre ello al Consejo de Secundaria, cita Uy Press.

Te recomendamos

Publicá tu comentario

Compartí tu opinión con toda la comunidad

chat_bubble
Si no puedes comentar, envianos un mensaje