Evo Morales pide preservar la vida del exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas

El presidente de Bolivia, Evo Morales, hizo un «llamado urgente» a la comunidad internacional para preservar la salud del exvicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, preso por el caso Odebrecht.

Glas se declaró en huelga de hambre tras ser trasladado a una cárcel de máxima seguridad hace más de diez días y su salud se ha deteriorado desde entonces.

«Hacemos un llamado urgente a la comunidad internacional para preservar su vida #ResisteGlas», escribió Morales en su cuenta de Twitter.

Al tiempo que expresó su preocupación por la salud del exvicepresidente ecuatoriano y su decisión de realizar una huelga de hambre para «defender sus derechos humanos».

Muy preocupados por la salud del Hno. @JorgeGlas, vicepresidente electo de #Ecuador, que está en el día 15 de #HuelgaDeHambre por defender sus derechos humanos que están siendo vulnerados. Hacemos un llamado urgente a la comunidad internacional para preservar su vida #ResisteGlas pic.twitter.com/hHr3tdaxfq

— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) 4 de noviembre de 2018

«Muy preocupados por la salud del hermano Jorge Glas, vicepresidente electo de Ecuador, que está en el día 15 de huelga de hambre por defender sus derechos humanos que están siendo vulnerados», agregó Morales.

Cynthia de Glas, esposa del exvicepresidente ecuatoriano, pidió recientemente apoyo internacional, ante el deterioro de la salud de Glas. Según dijo el cambio abrupto a una cárcel de máxima seguridad lejos de Quito (la capital), ordenada por el gobierno, amenaza su integridad.

Glas fue condenado a seis años de prisión por un caso de supuesta asociación ilícita que está relacionado con la trama de corrupción de Odebrecht.

El pasado 22 de octubre fue trasladado a una prisión de máxima seguridad y en señal de protesta inició una huelga de hambre que mantiene hasta hoy. Glas denunció ser un «preso político» y denunció una supuesta persecución emprendida en su contra por el Gobierno de Lenín Moreno.

Glas fue ministro y vicepresidente durante la Administración de Rafael Correa (2007-2017) y se presentó para repetir en 2017 en fórmula electoral con el actual mandatario, Lenín Moreno, del cual se distanció apenas asumió el mando por las decisiones que el nuevo gobierno estaba tomando. Luego apareció la investigación por la aparente corrupción y Moreno lo separó del cargo, el cual perdió finalmente al ingresar a prisión.

Hasta antes del traslado Glas estuvo en la Cárcel 4 de Quito, primero en prisión preventiva y luego ya condenado.

Desde el inicio de la investigación la defensa del exvicepresidente sostuvo que el proceso en su contra tenía fines políticos y solo buscaba despojarlo de la vicepresidencia, pues no existían pruebas para inculparlo. Rafael Correa, el exmandatario ecuatoriano, denunció que Moreno le haría lo mismo que Michel Temer a Dilma Rousseff en Brasil, solo que al revés.

El gobierno ecuatoriano anunció que el traslado de prisión responde a motivos de seguridad, mientras que los abogados de Glas cuestionan el proceder por violentar su derecho de inmediación, toda vez que el proceso se encuentra en Recurso de Casación.

Según denunciaron, además se transgrede la normativa internacional sobre la protección a personas privadas de la libertad.

Glas y sus más cercanos denuncian que él es una víctima de la judicialización de la política y un caso más de arremetida contra líderes progresistas en América Latina, como los expresidentes Luis Inacio Lula da Silva (Brasil) y Cristina Fernández (Argentina).