Juntan firmas para cerrar el canal de una ‘youtuber’ por inducir a la anorexia

Eugenia Cooney es una ‘youtuber’ estadounidense de 22 años que pesa poco más de 27 kilos y su canal es seguido por más de 870.000 personas.

Su aspecto refleja su grave problema de salud y, ante su popularidad, se ha iniciado una junta de firmas a través de la plataforma Charge.org para que se le cierre la cuenta a la joven, ya que consideran que induce a la anorexia. La iniciativa ya fue acompañada por 11 mil personas.

Cooney en sus videos habla de videojuegos, maquillaje, peluquería o moda y muy pocas veces hace referencia a su estado de salud, aunque constantemente le consultan sobre. Las pocas veces que se refirió al tema aseguró que su cuerpo es así y que no se está muriendo.

La petición que exige que se cierre la cuenta de Cooney señala: “Puede que no intente influenciar a sus seguidores intencionalmente (más de 870.000 personas están suscritas a su canal), pero no ayuda a las niñas con anorexia u otros problemas alimenticios al mostrar más del 50% de su cuerpo en los videos y fotos».

Y recalca que el público principal de esta joven tiene entre 12 y 21 años, un rango de edad proclive a sufrir trastornos alimenticios por lo que ella está dando un «muy mal ejemplo» para todos ellos.

En el texto los impulsores de que se cierre la cuenta informan: ¿Sabías que cada 62 minutos alguien muere como resultado de un trastorno alimenticio?.

Mientras que aclaran que la petición no es para desalentar a Cooney, provocar que la insulten ni que la menosprecien,, sino que todo lo contrario, es para que ella consiga ayuda y para que su joven público adolescente no esté expuesto a la imagen que ella promueve.

Su respuesta

Ante la repercusión por su estado de salud la joven dijo en su canal «siento mucho que la gente esté molesta conmigo, no estoy tratando de hacer nada malo. Nunca intenté ser una mala influencia ni he incitado a los demás a que se parezcan a mi”.

Mientras que agregó: «Desearía que la gente tuviera menos odio y fuera más positiva. Gracias, de todos modos, a la gente que se preocupó por mi. Estoy definitivamente bien y no estoy muerta ni nada por el estilo jajaja. ¡Los amo, chicos!».