Iglesia de Inglaterra aprueba ordenación de obispas: las primeras se conocerán en 2015
A veinte años que la Iglesia anglicana aprobara la ordenación de mujeres para ejercer el sacerdocio, ahora aprueba las futuras obispas que desde el año entrante podrán ocupar las vacantes que surjan en las diócesis inglesas.
El sínodo de la Iglesia de Inglaterra, publicó finalmente lo aprobado el pasado lunes por votación “a mano alzada” de su órgano legislativo, con lo cual concluye el último trámite, de un proceso que comenzó en 2012, y era necesario para que las mujeres puedan acceder a un cargo superior al sacerdocio.
Reunidos en la abadía de Westminster, principal bastión de los protestantes anglicanos en el mundo, y en lo que para muchos fue un acto “histórico”, los integrantes del sínodo aprobaron la enmienda de la ley canónica, que ahora tendrá la posibilidad explícita de consagrar mujeres como obispas.
La práctica en la congregación fundacional, es un hito en tanto Estados Unidos, Irlanda, Nueva Zelanda y Canadá, ya lo habían reconocido tiempo atrás, pero no había aún visto bueno desde el ala más ortodoxa y tradicional de la congregación.
El arzobispo de Canterbury y el reto de mantener la unidad
Sin embargo la votación del “legislativo” religioso no ha sido unánime. Para buena parte de los fieles, ya había sido suficiente con que veinte años atrás se permitiera ordenar sacerdotes mujeres, algo que generó un rápido cambio en los cuadros eclesiásticos. En estas dos décadas, tan solo en Inglaterra, de los 7.798 sacerdotes de la rama, 1.781 son mujeres, un porcentaje de crecimiento “vertiginoso”, para un cambio que ni los más optimistas esperaban fuera tan rápido.
Ahora las sacerdotistas más veteranas de ese grupo, podrían ya acceder al obispado el año entrante, en varias diócesis donde ya se sabe habrá vacantes. Las más importante son: Southwell, Nottingham, Gloucester, Oxford y Newcastle, según informa el servicio de la BBC .
En los demás países ya existen 29 mujeres obispas anglicanas ejerciendo.
Sin embargo las diferencias de criterio sobre el punto en Inglaterra, podrían aumentar incipientes focos divisionistas, un reto de primer orden para el arzobispo de Canterbury, Justin Selby, que deberá preservar la unidad, por encima de cualquier otra misión.
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