Amnistía Internacional: La Justicia está fallando a las víctimas de violación sexual

La organización de Derechos Humanos, Amnistía Internacional, se sumó al reproche a la sentencia del sonado y polémico caso «la manada», en el que varios hombres que violaron a una mujer en Pamplona fueron sentenciados a prisión por «abuso sexual» y no por violación sexual.

Los hechos tuvieron lugar en julio de 2016 en la ciudad de Pamplona, España, durante las concurridas fiestas de San Fermín. Los cinco hombres se ofrecieron a acompañar a la mujer a su vehículo pero, en lugar de eso, la arrastraron a la entrada de un edificio donde la sometieron a diferentes formas de penetración, a veces de forma simultánea, y sin preservativo. Tras el ataque, se marcharon dejando a la mujer casi desnuda en media calle.

Uno de ellos le robó el teléfono después del abuso, e incluso tuvieron la ligereza de filmar el ataque y compartirlo en grupos de Whatsapp. Las grabaciones fueron examinadas por los jueces como prueba clave y, aunque la Fiscalía había pedido una pena de casi 23 años por violación en grupo y otros cargos, solamente recibieron 9.

La sentencia fue dictada por tres jueces, siendo uno de ellos el que emitió el voto más escandaloso y que ha causado el enojo público a nivel internacional: en este alegaba que los hombres debían ser considerados «inocentes» incluso del delito más leve puesto que la víctima no había expresado una negación explícita, la ausencia de un “no” y de resistencia física significaban que tenía que haber consentido.

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La Justicia le falla a las víctimas de violación

Mónica Costa Riba, responsable de Campañas sobre Derechos de las Mujeres de Amnistía Internacional, declaró: “Esta sentencia muestra que tanto la ley como el sistema judicial están fallando cruelmente a las víctimas de violación, y están agravando su trauma en España. El sentar en el banquillo la conducta de las víctimas en lugar de las acciones de los acusados, transmite un peligroso mensaje. La ausencia de consentimiento es lo que tiene que importar, no si la víctima opuso resistencia física o no al ataque».

“La sentencia arroja luz sobre la injusticia que se produce cuando las definiciones de violación están desfasadas y van por detrás de las normas internacionales. Según las normas internacionales de derechos humanos, las relaciones sexuales no consentidas constituyen violación. Hasta ahora, nueve países de Europa han revisado sus definiciones de violación basadas en la ausencia de consentimiento, en lugar de en el uso de la violencia. Como ha quedado dolorosamente patente en este caso, España no es uno de esos países», agregó Costa Riba.