Pyongyang calificó a la gira de Trump por Asia como una «visita belicista» y advirtió que fortalece sus pruebas nucleares

El Gobierno de Corea del Norte advirtió este sábado que la gira del presidente estadounidense Donald Trump por los países asiáticos fue una «visita belicista» para generar confrontación e impedir el programa de autodefensa nuclear norcoreano.

«Durante su visita, Trump puso de relieve su verdadera naturaleza como destructor de la paz y la estabilidad mundial y ha suplicado por una guerra en la península coreana», afirmó un vocero norcoreano.

Al tiempo que calificó al viaje del magnate a la región como «el negocio de un negociante de guerra para sacar dinero de los bolsillos de sus aliados y para llenar la avaricia de la dictadura militar».

La gira de Trump tiene como objetivos «enriquecer los monopolios de la industria de defensa de Estados Unidos a costa de aliados subordinados», expresó el Gobierno de Corea del Norte.

No habrá negociación

Este viernes el embajador norcoreano ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ja Song-nam, afirmó en la Asamblea General sobre las actividades del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), del que su país no forma parte que “Corea del Norte no pondrá sus armas nucleares y misiles balísticos en la mesa de negociaciones”.

Y precisó que se solamente negociará sobre ese asunto cuando “la política hostil y la amenaza nuclear de Estados Unidos contra Corea del Norte sean completamente erradicadas”.

Mientras tanto, dijo, su país «continuará avanzando simultáneamente en dos frentes»: desarrollando tanto su economía como su potencial nuclear. «[Corea del Norte] llegará hasta el final de su camino elegido y sin la menor desviación», aseguró.

El diplomático consideró que esa política “extremadamente hostil” y la amenaza nuclear de Washington contra su país llevó a la península coreana al borde de una guerra nuclear.

Al tiempo que recordó que a pesar de las serias preocupaciones de la comunidad internacional, el país norteamericano continúa realizando ejercicios militares conjuntos con sus aliados regionales con el objetivo de planificar un ataque nuclear contra Corea del Norte.

Finalmente recalcó que Corea del Norte “como un Estado nuclear responsable contribuirá de manera productiva a garantizar la paz y la seguridad en la península de Corea y en el resto del mundo”.