Trump firma la ley sobre las sanciones a Rusia a pesar de considerar que es «significativamente defectuosa»

El presidente de EE.UU., Donald Trump, firmó este miércoles la ley que impone nuevas sanciones a Moscú por la supuesta interferencia rusa en las elecciones presidenciales de 2016 y por su intervención en Ucrania en 2014, confirmó la consejera del mandatario estadounidense, Kellyanne Conway. La normativa también establece sanciones contra Irán y Corea del Norte.

La ley impide además que el presidente actúe unilateralmente para eliminar ciertas medidas restrictivas contra estos países, una acción de los legisladores para evitar que Trump rebaje sanciones a Rusia en su afán de mejorar las relaciones entre ambos países.

Desde la Casa Blanca informan que las medidas restrictivas incluyen negar la entrada a EE.UU. a ciertas personas, sin excepciones para los embajadores.

Trump ha indicado en un comunicado que esta ley es «significativamente defectuosa» e incluye disposiciones inconstitucionales que desplazan la autoridad del presidente.

«Al limitar la flexibilidad del Ejecutivo, esta ley hace más difícil para Estados Unidos lograr buenos acuerdos para el pueblo estadounidense que provocarán que China, Rusia y Corea del Norte se unan más», expresó y agregó que «el marco de nuestra Constitución pone la política exterior en las manos del presidente».

«Esperamos que haya cooperación entre los dos países en asuntos globales importantes que provoquen que estas sanciones ya no sean necesarias», manifestó al aclarar que a pesar de su desacuerdo con la ley la firmaba «por el bien de la unidad nacional».

«EE.UU. pierde la percepción de la realidad»

El presidente del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara Alta de la Asamblea Federal rusa, Konstantín Kosachov, declaró que EE.UU. ha demostrado una pérdida de la percepción de la realidad con la aprobación de las nuevas imposiciones.

A su vez consideró que con la firma de la ley Trump «se ha rendido» y que a partir de ahora la cooperación de Rusia con EE.UU. va a tener un «carácter selectivo» durante los próximos años.

«Al ignorar los intereses de sus aliados, promoviendo solo los propios, EE.UU. socava seriamente la solidaridad transatlántica (…) las amenazas reales se reforzarán, no al revés», lamentó en referencia a los problemas respecto a Corea del Norte e Irán.

Por su parte desde la Cancillería rusa consideraron que la firma de ley «confirma una vez más la agresividad extrema de EE.UU. en los asuntos internacionales».

«Con el pretexto de su ‘excepcionalidad’, EE.UU. ignora arrogantemente las posturas e intereses de otros Estados», denunció.

Recientemente Unión Europea advirtió sobre posibles represalias si las empresas europeas se veían obstaculizadas por unas sanciones destinadas a reducir las exportaciones energéticas de Rusia.

La Cancillería recordó que Moscú ha estado «todo lo posible para normalizar las relaciones bilaterales» y desarrollar la cooperación con EE.UU. en los principales problemas de la agenda internacional.
Y denunció que Washington «utiliza el pretexto absolutamente inverosímil» de la interferencia de Rusia en sus asuntos internos para llevar a cabo «acciones groseras antirrusas una tras otra», que son contrarias a los principios del derecho internacional.