Misterio de las piedras rodantes del Valle de la Muerte tiene explicación científica

En la planicie de Racetrack Playa, en el desierto del Valle de la Muerte, en Estados Unidos, un entrañable misterio aguarda solución desde hace décadas: decenas de rocas repartidas en el lugar, tienen detrás una estela de barro seco, como si cada tanto fueran arrastradas de sitio en sitio. Pero nadie nunca ha visto quien lo hace, como lo hace ya que el Valle de la Muerte no es precisamente un sitio donde viva nadie, ni sea frecuentado por más que quienes se interesan en el misterio.

La llanura, levemente inclinada, se seca y agrieta por tremendos calores en verano y se congela y cubre de nieve y hielo en invierno: las piedras han sido identificadas y realmente se mueven, pero nadie sabe como ni cuando.

Para los UFOlogos, la respuesta ha sido simple: campos de energía misteriosos, razones alienígenas, e incluso consecuencias del aterrizaje de platillos voladores: pero nadie ha visto, ni vio.

Oficialmente desde 1948 se está investigando

El tema es tan antiguo como el que más y el Servicio de Geología de EE.UU. mandó ya en 1948 un equipo para analizar el tema. Pero ni siquiera mojando la superficie e intentando impulsar con el propulsor de un avión a las piedras, éstas se movieron y menos aún dejaron los consabidos surcos.

Durante décadas la percepción que el hielo y la superficie arcillosa tenían la causa, fue la percepción pero nadie dio con la tecla.

Finalmente el físico Ralph Lorenz, dedicó su tiempo a estudiar como operaban las masas de hielo alrededor de cada roca y los coeficientes de rozamiento, dando la solución al enigma.

Cuando llueve el valle se inunda y la superficie se congela: las rocas están unidas al hielo en la parte superior y en el agua en la inferior. Si llueve más todavía, la roca se despega del suelo con el hielo y su bajo índice de fricción con el agua permite que el viento desplace al conjunto piedra-hielo. La parte baja de la roca que está en contacto con el resbaladizo suelo de arcilla, excava los surcos que tanto misterio generaron.