Hollywood

Fede Álvarez: entrevista al uruguayo que dirige la remake de «Evil Dead», bajo el ala de Sam Raimi

Tras conquistar Hollywood con un video que se hizo viral en YouTube, el uruguayo Fede Álvarez dirige una remake del filme de culto "Evil Dead" (Posesión infernal), "una película ridículamente sangrienta" que mantiene el espíritu de la original de Sam Raimi.

Fede Álvarez

Durante un autoimpuesto retiro en una cabaña abandonada en el bosque, cinco jóvenes que curiosean un libro maldito despiertan sin querer malignos espíritus que van poseyéndolos, uno a uno, en un desenfreno de sangre, tripas, sesos y amputaciones que es deleite de los fanáticos del «gore» más crudo.

La cinta, que se estrena este viernes en Estados Unidos, España y Latinoamérica, fue producida por el creador de la serie Sam Raimi, quien tras darse a conocer gracias al éxito de la primera «Evil Dead» en 1981 se ha convertido en un maestro del horror.

Para la realización de esta nueva «Evil Dead», Raimi contrató al uruguayo Álvarez, quien llamó la atención de Hollywood cuando en 2009 publicó en YouTube el videoclip «Ataque de Pánico», sobre una invasión extraterrestre en Montevideo.

El director de 35 años, proveniente del mundo de la publicidad, vivió desde entonces el sueño americano más clásico: coescribió el guión junto a su amigo y colega Rodo Sayagués y dirigió su película debut en Nueva Zelanda, sin restricciones artísticas ni económicas.

Según la base de datos del cine IMDb.com, «Evil Dead» fue realizada con 14 millones de dólares, una cifra modesta para Hollywood, pero extravagante en términos latinoamericanos.

«Cuando venís de un mercado tan limitado como Uruguay, donde nunca hay presupuesto, tener la chance de trabajar con un presupuesto más importante y tener la chance de llevar tu visión a la pantalla sin limitaciones, es un placer», dijo Álvarez a la AFP.

Además, el cineasta contó con toda la libertad creativa de parte del productor, siempre que mantuviera sin cambios la base del filme: cinco amigos, un libro maldito y una cabaña.

Raimi «nunca quiso darme soluciones, sino guiarnos, ayudarnos a entender qué cosas quieren los fanáticos de terror, porque es un público que él conoce bien. Nos dio muchísimas libertades», dijo Álvarez durante su paso por Los Ángeles.

«Lo más importante era mantener el espíritu de la película original», agregó. «De resto, nada era era demasiado. La película tenía que ser tan, tan sangrienta que casi fuera ridícula y él (Sam Raimi) quería que fuera shockeante».

Al respecto, el propio Raimi, artífice de Spider Man, comentó: «Algunas veces (Álvarez) nos escuchaba y otras no. Lenta pero firmemente, le fui cediendo libertad artística, porque respeté mucho su visión».

El guión da un vuelco al cliché: los amigos se reúnen en la cabaña no para divertirse, sino para ayudar a Mia (Jane Levy) a desintoxicarse de su adicción a la heroína, lo cual les hace suponer al inicio que el violento comportamiento de la joven se explica por su síndrome de abstinencia.

Este giro da una respuesta lógica a la pregunta que suele hacerse el espectador ante los filmes del género («¿Por qué no se van de allí?») y, a la vez, provee a los realizadores un valioso elemento de suspenso.

«La idea de ir a la cabaña a hacer esta intervención de drogas para Mia surgió de nuestra molestia con las películas del pasado de terror, que son siempre amigos que van a divertirse, a tomar cerveza, y que eran cosas que nos parecían aburridas y que habíamos visto demasiadas veces», dijo Álvarez.

Para conseguir actuaciones verosímiles, el director prefirió no abusar de los efectos digitales y creó los monstruos en base a maquillaje, a técnicas de titiritero y usando locaciones reales.

«Las películas de terror tienen que tener efectos de verdad, los efectos especiales de computadora muchas veces no dan miedo y hacen que las películas envejezcan muy rápido», dijo Álvarez.

Además, «exponer a los actores a cosas reales es mejor que exponerlos a una pantalla verde y que tengan que imaginar lo que está ahí», agregó, sin querer revelar el secreto tras los llamados efectos «prácticos» -que no son realizados digitalmente-, como cuando Mia se corta la lengua en dos.

«Teníamos un molde de la lengua de la actriz, hicimos todo de verdad. Pero si te cuento mucho los efectos es como si un mago te diera los trucos de magia», bromeó.

«Evil Dead» llega a las salas favorecida por buenas críticas. El sitio especializado Bloody Disgusting la clasificó con cuatro calaveras sobre cinco y la página que contabiliza las críticas, Rotten Tomatoes, le da 79% de comentarios positivos.

//youtu.be/yxX1DcgKBdE

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