No soples las velas de la torta de cumpleaños nunca más

Si vas a un cumpleaños y no se soplan las velas de la torta, es como si hubiese existido la celebración. Si el celebrado acumula muchos años, lo mejor es poner un par de velas con forma de número, pero sucede lo mismo: millones y millones de bacterias salen volando de la boca del que sopla, y luego todos comemos una porción felices de la vida.

Investigadores de la Universidad de Clemson, Carolina del Sur, descubrieron que la cantidad de bacterias en una torta aumenta en 1.400% después de que se soplen las velas.

En el estudio titulado «Transferencia bacteriana asociada con el soplido de velas en tortas de cumpleaños», publicado en la revista científica Journal of Food Research, los científicos midieron la cantidad de bacterias en un trozo de espuma plast antes y después de soplarle encima tal como se hace en los cumpleaños. Se realizaron tres pruebas exactamente iguales con 11 días de separación entre estas, y concluyeron que aumenta 15 veces la presencia de bacterias.

Más y más bacterias

El número de bacterias crece drásticamente cuando la torta tiene cobertura, pues se pueden multiplicar hasta 100 veces después de soplarle encima.

Otros estudios hay habían encontrado que soplar en varias instancias -no solo en las tortas de cumpleaños- liberan partículas de humedad de la boca al ambiente. Una investigación había descubierto que el 90% de las bacterias transportadas en las minúsculas golas que salen de los soplidos pueden permanecer unos 30 minutos en el aire.

“Algunas personas soplan en la torta y no transfieren ninguna bacteria, mientras que otras transfieren un montón de bacterias”, aseguró a The Atlantic el profesor Paul Dawson, pero aclaró que, desde su perspectiva, «no es un gran problema de salud”.