«La generación sin ganas»: ¿viviremos sin sexo para el 2030?

En un reciente trabajo, el investigador David Spiegelhalter, experto en estadística de la Universidad de Cambridge, cotejó distintos estudios que corroboran la tesis de que la frecuencia sexual de las parejas ha disminuido considerablemente en el Reino Unido.

Según la NATSAL (National Survey of Sexual Attitudes and Lifestyles), en 1990 las parejas de entre los 16 y 64 años de edad tenían relaciones sexuales 5 veces por mes; esa cifra disminuyó considerablemente hacia el año 2010, cuando la cantidad de encuentros se redujo hasta un 40%.

Algunos ya empiezan a cuestionarse sobre qué pasará con la salud de la población mundial pues, como es bien sabido, el sexo tiene numerosos beneficios para quien lo practica de forma segura y regular. Tener relaciones sexuales coitales es favorable para la salud cardiovascular, para bajar de peso, al conciliar el sueño, mejora el sistema inmunitario y es un maravilloso antidepresivo. Por otro lado, al abstinencia podría aumentar el riesgo de todo lo contrario. Algunos especialistas se aventuran a decir que para el año 2030, la actividad sexual habrá disminudio a niveles bajos jamás vistos.

Los millennials, portadores del problema a gran escala

La generación de jóvenes actuales está viviendo este declive del sexo saludable de forma acelerada. Muchos de los millennials (o Generación Y), o sea aquellos que nacieron entre 1980 y 2000, están más concentrados navegando en internet en sus diversos dispositivos hiperconectados, o cazando pokemones en su celular.

Según un estudio de la Universidad de San Diego, California, sobre conductas sexuales, señala que esta generación de jóvenes tienen menos sexo que los que tenían sus padres a esa edad. Esta investigación analizó los datos de 26.707 individuos de distintas edades, encuestados por la General Social Survey de Estados Unidos. Los resultados mostraron que al menos el 15% de los jóvenes de entre 20 y 24 años nacidos en los noventas afirmaron no haber tenido ningún encuentro sexual desde los 18. Ese dato se contrapone al 6% de la Geneneración X -o sea, sus padres, nacidos en los 60’s y 70’s- que tenían mayor frecuencia sexual y más cantidad de parejas en la misma franja de edad.

Según publica el filósofo coreano-alemán Byung-Chul Han en su libro «La Sociedad del Cansancio«, las extenuantes jornadas laborales cada vez más largas y mal pagadas dejan poco espacio para las prácticas sexuales. Han afirma que «nuestros padres y abuelos tenían los encuentros sexuales como parte de su día a día, pero esta generación debe buscar el espacio en la agenda para tener sexo». El pensador hace la comparación entre el sexo y subir escaleras. «Antes la gente subía escaleras, caminaba lagos trayectos a pie, cargaban las cosas, ejercitábamos los músculos de todo el cuerpo en las tareas diarias. Ahora, para hacer ejercicio, hay que inscribirse a un gimnasio. Lo mismo pasa con el sexo; hemos domesticado el deseo».