Ministerio de Industria realizará estudio sobre protección de las personas contra exposición al radón en hogares

El radón es un gas noble radiactivo, que en altas concentraciones resulta peligroso para la salud. Aunque, debido a la geología y las construcciones uruguayas, se descarta que sea un problema para el país, el monitoreo es obligatorio para todas las naciones.

Se estima que el 50 % de la radiación natural a la que estamos expuestos proviene del radón.

Normas internacionales

El estudio será el primero en el país y estará enmarcado en el proyecto de cooperación técnica sobre Protección radiológica del público.

Por su parte, el experto del OIEA, Fabio López, explicó que el radón “está entre nosotros desde antes de que llegáramos a pisar el planeta”.

Proviene de la desintegración de la serie natural del uranio 238. Está en la corteza terrestre y se distribuye en forma global. Sin embargo, “existen regiones donde se encuentra más concentración de uranio, y por ende de radón”.

Al ser un gas, tiene la propiedad de concentrarse en lugares cerrados, explicó el especialista. Por lo tanto, “si no existe un medio geológico rico en radón y no tenemos ambientes cerrados, no existe la posibilidad de una gran concentración de radón”.

Este gas, en altas concentraciones, es la segunda causa de cáncer de pulmón, declarado por la Organización Mundial de la Salud (entre el 3 y el 14 % de los casos).

No obstante, tomando en cuenta los datos de Argentina, donde ya se han realizado mediciones en 4.000 viviendas, se puede dar “certeza de que el radón no es un problema para nuestros países”, aseveró.

Ello se debe a que “no estamos asentados en suelos ricos en uranio y a que, debido a nuestros climas, las viviendas no suelen estar cerradas”.

Aunque las concentraciones de radón no son muy relevantes en la región y, por lo tanto, se prevé que no lo sean en Uruguay, es necesario realizar mediciones, ya que el plan que se desarrollará es una “responsabilidad regulatoria”.

El OIEA pone como condición la obligación de hacer un mapeo, y por ello llegó a nuestro país el especialista Fabio López, quien asesorará en la puesta en práctica del plan de monitoreo que se desarrollará en viviendas de Montevideo y al menos otras dos ciudades del interior.

El plan no tendrá costo para el país, salvo los traslados, ya que será solventado por el OIEA.

Monitor pasivo

Para ejecutarlo, se requerirá que las personas que contacte el Ministerio de Vivienda estén dispuestas a “instalar durante tres meses un monitor absolutamente pasivo de plástico y no frágil, en sus viviendas.

A través de ellos, se determinará la concentración del radón. El objetivo es llegar a diferentes barrios y regiones.

La secretaría de Estado se encargará de la logística. Se prevé que el plan se inicie en los próximos meses.

Para evitar las altas concentraciones de radón, basta con ventilar las viviendas, explicó López.

El experto agregó que el valor de radón a partir del cual se deben tomar medidas se sitúa entre 200 y 300 becquerel por metro cúbico (bq/m3). El promedio argentino es de 40.

Por sus condiciones de construcción y su clima, se han descubierto altos índices de radón en los países nórdicos, donde pueden hallarse promedios de 180 o 190 bq/m3.