AGUA EMBOTELLADA

Más de cien escuelas rurales de todo el país reciben agua embotellada por problemas de potabilización

Aproximadamente 100 escuelas rurales de todo el país reciben agua embotellada debido a “diferentes causas plenamente justificadas” que “van desde baja potabilidad” del vital elemento “por napas contaminadas” o pozos “con problemas de perforación que se han obstruido con el paso del tiempo”.

Las “napas contaminadas” o pozos “con problemas de perforación que se han obstruido con el paso del tiempo” son algunos de los causantes.

El Director General del Consejo de Educación Inicial y Primaria, maestro Héctor Florit, informó que “son trámites individuales que hicieron las escuelas” en su momento  y por diferentes motivos.

Florit señaló que en muchos casos el convenio entre la Anep y Ose permitió reconstruir los pozos pero (el envío de agua) no es inmediato que se suspenda y en muchos casos “se continúa enviando durante meses”, agregó.

En diálogo con la Asociación de Radios del Interior afirmó que “hoy debemos tener cerca de cien instituciones que reciben agua embotellada y en la gran mayoría es por causas plenamente justificadas estas solicitudes”, puntualizó.

Responsabilidad

Según Florit “lo más importante es que hay 17 mil niños en más de mil escuelas rurales que tienen que tener calidad en alimentación y disponibilidad de agua y es responsabilidad que las autoridades asumen plenamente”, enfatizó en jerarca de la educación.

En lo que refiere a las escuelas que se han visto afectadas por el déficit hídrico, Florit informó que “los dificultades más graves están concentradas en Cerro Largo”.

En ese sentido, indicó, “se nos notificó desde el Comité Departamental que hay 12 escuelas rurales donde falta agua”.

En general se trata de escuelas con matrículas muy bajas. “En algunos casos son centros educativos que tienen cinco o seis alumnos y en algunos casos dos alumnos”, comentó.

Sobre las posibilidades de lluvia para los próximos días, el director del Sistema Nacional de Emergencias, Fernando Traversa, dijo días pasados al diario El País, que los mapas nos dicen que de mayo en adelante la situación tiende a normalizarse y por ende se observarían eventos de lluvias al menos una vez por semana”.

“Esto no quiere decir que no vayamos a seguir monitoreando, porque al mismo tiempo las perspectivas climáticas nos están diciendo que vamos a tener una temperatura entre uno y dos grados por encima de lo que es promedialmente normal en otoño. Por ende, va a llover normalmente pero también va a evaporar más que lo habitual, por lo tanto es una situación que vamos a seguir atendiendo».

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