OMS convoca en el Día Mundial de la Salud Mental a «fortalecer la respuesta»

En su mensaje para este año, la OMS ha recordado que la salud mental es «parte integral de la salud, tanto es así que no hay salud sin salud mental» y recuerda que las patologías están determinadas por factores biológicos, pero también socioeconómicos y medioambientales.

Considerada un componente «integral y esencial», la salud mental requiere de «estrategias e intervenciones intersectoriales eficaces y rentables de promoción protección y restablecimiento», apunta el organismo mundial.

En esa línea recuerda también la importancia del tema para el bienestar individual y de la comunidad en tanto es con esa salud, «que la persona realiza sus capacidades y es capaz de hacer frente al estrés normal de la vida, de trabajar de forma productiva y de contribuir a su comunidad. En este sentido positivo, la salud mental es el fundamento del bienestar individual y del funcionamiento eficaz de la comunidad», sentencia.

La promoción de la salud mental y su fomento esencial

Para esta jornada la OMS, recuerda la importancia de estrategias intersectoriales a fomentar entre las sociedades y los países en su conjunto como: las intervenciones en la infancia precoz, incluso con visitas a las embarazadas, actividades psicosociales preescolares y la ayuda nutricional a las poblaciones menos favorecidas.

Enfatiza también el apoyo a los niños y «la emancipación socioeconómica de la mujer», como claves en la prevención del problema, además del «apoyo social a las poblaciones geriátricas». Apunta además a la necesidad de incentivar intervenciones de salud mental en el trabajo, programas de prevención de la violencia y reducción de la pobreza, así como legislación y campañas contra la discriminación, «y la promoción de los derechos, las oportunidades y la atención de las personas con trastornos mentales».

El ente de ONU apuntan nuevamente a que los gobiernos recuerden el plan de acción integral sobre salud mental acordado para el período 2013-2020, donde las naciones se comprometieron a adoptar medidas específicas para mejorar la salud mental y contribuir al logro de los objetivos mundiales.