El poder de la gente puede seguir haciendo posible la nueva televisión uruguaya

Hace 1 año nacía TVLIBRE la nueva televisión uruguaya, el poder de la gente.

El establishment se asustó. La televisión es la pieza más sensible del sistema hegemónico y nunca abrió sus puertas a las voces independientes. O se estaba con el régimen o contra él.

Se puede editar un diario rebelde, incluso poner en el aire una radio que no se calla, pero lo que no está permitido es acceder a la televisión, el órgano de mayor penetración de masas, el que modela los gustos, costumbres y preferencias de la inmensa mayoría de la población.

TVLIBRE desafió al sistema e irrumpió con desparpajo y serenidad en el circuito televisivo con una programación de 24 horas, cien por ciento nacional, diferente, atrevida, sin pelos en la lengua, sacando de su siesta al monopolio que desde hace medio siglo impone sus mensajes a perpetuidad a la sociedad civil y política de nuestro país.

Y el sistema reaccionó con furia. Primero intentaron impedirnos la pantalla en Montevideo. Amenazaron, presionaron hasta lo indecible pero lo hicieron tardíamente cuando ya nuestros contratos estaban debidamente asegurados. Y ganamos la batalla de Montevideo. Reagruparon fuerzas para impedirnos entrar en el interior. Fue una batalla campal. Apelamos a la gente, nuestro único capital, y miles de firmas exigieron a los canales del interior que nos abrieran las puertas. Triunfó la fuerza de la gente y TVLIBRE ya está en todos los rincones del país. Hoy más de 100 canales difunden nuestra imagen por todo el territorio nacional.

Pero todo fue a un costo muy alto. Nos daban pantalla pero no nos pagarían suma alguna por nuestros servicios.

Tuvimos que optar entre cancelar el proyecto o ponerlo al aire sin recibir suma alguna de los canales que lo transmitían ni tampoco suma alguna de los abonados de esos canales ya que el abono mensual que pagaban los suscriptores, en su totalidad es recibido por las empresas de la televisión cerrada, que nada pagan a TVLIBRE.

Pese a que esas mismas empresas, sí abonan lo que corresponde a todas y cada una de las decenas de señales que difunde por sus canales cable (HBO, CNN, ESPN, Infinito, National Geographic, Crónica, Tenfield, FOX, Cartoon Network. Etc., etc., etc. ).

Decidimos aceptar el reto y correr los riesgos.

Nuestra fuerza estaba en la propuesta diferente, en nuestro contenido alternativo, sembrando las semillas de la nueva televisión uruguaya, antimonopólica, solidaria, informando sin secretos, educando sin frivolidades, sirviendo a todos los sectores sociales con el acento puesto en los más postergados y en los más desinformados.

Confiamos en que al ver la seriedad de nuestra programación y nuestros informativos, los canales accedieran a abonar un precio justo. También confiamos en que nuestros ratings pudieran romper una práctica de inversión publicitaria destinada únicamente al monopolio privado.

Tuvimos un éxito singular de audiencia. Algunos programas incluso superaron la audiencia de los canales abiertos.

Sin embargo, el bloqueo fue total.

La publicidad recibida no superó el 2% de los egresos de TVLIBRE.

Solamente por el uso del satélite Nahuel, nuestro canal invierte 8.500 dólares mensuales y ni siquiera una parte proporcional de este gasto, requerido para llevar la señal a los más de 100 canales por abonados que la reciben gratuitamente, es pagado por estas empresas.

TVLIBRE es el único canal privado que no recibe ingresos por ningún concepto para poder subsistir.

Lo que no lograron al intentar que no obtuviéramos pantalla alguna, dada la reacción multitudinaria de la gente, que quebró el bloqueo de las pantallas, lo intentan obtener cerrando todas nuestras puertas de ingresos.

La situación es paradójica porque a medida que se va deteriorando económicamente el emprendimiento de la nueva televisión uruguaya, que por primera vez irrumpe en el escenario social y político del país, son más los canales que se suman para transmitir nuestra señal, aunque nada paguen por ello.

La gente ha percibido la gratuidad de nuestros servicios y nos ha hecho llegar por millares su solidaridad y su pedido exigente de que no desaparezcamos ni del aire ni de sus vidas.

Ante la gravedad de la situación, ya insostenible, hemos decidido apelar a la sociedad civil para que el único canal gratuito privado y el único alternativo al monopolio pueda seguir influyendo en la comunidad uruguaya.

El plan consiste en proponerle a todos los uruguayos que apoyan la nueva televisión uruguaya, que abonen a través del teléfono 0908-3535, la suma de treinta y cinco pesos uruguayos mensuales *, cifra que consideramos simbólica pero capaz de torcerle la mano a las fuerzas que desean que desaparezcamos de las pantallas en todo el país.

Es tal la adhesión que recibimos a diario que entendemos que esa cifra mínima, que no excluye que otros ciudadanos puedan aumentarla, será la tabla de salvación del proyecto alternativo que desde hace 1 año hemos instalado con singular éxito de público en la televisión nacional. Será la propia sociedad civil, los propios usuarios, los que le dirán a los canales que no abonan ni siquiera su propia recepción satelital y al poder económico que bloquea esta iniciativa alternativa al monopolio, que TVLIBRE es virtualmente de ellos y han decidido mantenerla en el aire.

Nuestro proyecto carece de fines de lucro. Es un proyecto al servicio de la gente, del cambio estructural del país y de la construcción de una sociedad solidaria con rostro humano.

TVLIBRE, el poder de la gente. Ese es nuestro eslogan. Y hoy estamos a punto de convertirlo en realidad.

 

Dr. Federico Fasano Mertens

Director de TVLIBRE