INMIGRANTES

Talvi dijo que los inmigrantes no deben ser «ciudadanos de segunda clase» y elogió la figura de Mujica

El colorado estuvo en el ciclo "De Cerca" y dio una entrevista en la que habló de sus propuestas como candidato presidencial, al tiempo que habló de su percepción de la realidad nacional y el escenario político.

Captura de pantalla. Cortesía de TV Ciudad
Captura de pantalla. Cortesía de TV Ciudad

El candidato presidencial del Partido Colorado, Ernesto Talvi, participó en el ciclo «De Cerca», de TV Ciudad, y respondió preguntas de todo tipo, desde aquellas en las que se le preguntó por su carrera profesional antes de la política hasta su nueva etapa como candidato nobel presidencial.

El economista dice que «siempre estuvo orientado a las políticas públicas, al diseño de políticas de gobierno para dar respuesta a los problemas y a los desafíos que el país tiene» y que, si bien antes ya le había ofrecido puestos políticos, recién ahora se sintió seguro para saltar a la arena presidencial.

Rememoró cuando el ex presidente Jorge Batlle vino en 2015 a darle el primer empujó para saltar a la busca de convertirse en presidente de la República. «El doctor Jorge Batlle (…) vino a y me dijo: ‘Mire, Ernesto, le vengo a plantear algo’. Y me dijo así sin anestesia: ‘Usted tiene un sueño, usted tiene un proyecto de país, usted tiene un equipo formidable de gente que se formó alrededor suyo y le puede armar un equipazo de gobierno. Se le va a sumar muchísima más de enorme cantidad», dijo Talvi al periodista Facundo Ponce de León, que viene dirigiendo las entrevistas.

Según el candidato, el país está viviendo un momento «irrespirable» por culpa de lo que llama «un fracaso educativo». «Ese fracaso educativo está totalmente ligado al hecho de que somos una sociedad más agresiva, más crispada, más violenta, más fracturada, una sociedad irrespirable comparada con lo que es ese Uruguay al que llegó mi padre», aseveró.

Mujica y los inmigrantes

Talvi invocó el concepto del «paisito» para criticar la forma en que la sociedad uruguaya se ve desde adentro. «No se trata de cambiar la idiosincrasia (de Uruguay) sino de recuperar esa vocación transformadora, vanguardista, no esa sensación de que ahora somos un ‘paisito’ en diminutivo, con aire melancólico y tristón», dijo.

«Cuando te escucho hablar esto del ‘paisito’, de cosa achicada, también pensaba que la presidencia de José Mujica nos puso en el ojo del mundo. Ahí no está el paisito, hay una inserción internacional del Uruguay», le acotó el periodista.

«Digo como nos venos nosotros», replicó Talvi, y continuó: «Digo cómo nos vemos nosotros. Eso es cómo nos ven los otros. El personaje Mujica tuvo esa proyección internacional y por muy buenas razones. Las personas valoran que un presidente tenga una vida austera, que renuncie a los privilegios del poder, que habiendo sido guerrillero haya respetado las instituciones democráticas. Habla más de Uruguay que de Mujica, pero no importa, había buenos motivos».

Añadió que «con sus restricciones» Mujica dice cosas que «a veces a uno lo dejan pensando» y que todo eso «lo hizo admirable».

Tras los elogios, lanzó críticas: «Fue un gran jefe de Estado pero un pésimo presidente, porque dejó al país un desorden financiero, fiscal, con las empresas públicas bajo agua. Fue un caos la administración Mujica.

Sobre la inmigración, el periodista le recordó que en un tuit de abril de 2019 habló directo al candidato de Cabildo Abierto, Guido Manini Ríos, diciéndole los venezolanos «no tiene por qué ser suplentes en el mercado laboral. Deben ser ‘titulares’ como cualquier uruguayo».

«Prefiero la inmigración sin restricciones porque nos falta gente. Y si son jóvenes y formados, ¡salgan corriendo a buscarlos!», agregó en dicho tuit.

Ponce de León explicó que él hablo con Manini Ríos y que este aseveró que nunca había querido hablar «contra los venezolanos».

«Leí con mucha precisión lo que dijo. Después se rectificó en parte, por suerte. Si a los inmigrnates los dejás entrar no los podés tratar como ciudadanos de clase B. Tienen los mismos derechos que los de Uruguay. Si no los querés dejar entrar, entonces estarás rompiendo con una tradición muy venerable en nuestro país, que somos generosos y abiertos con los inmigrantes. Somos un país de inmigrantes», concluyó al respecto.

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