Correo ratificó por mayoría el acuerdo con Diarios: Batlle observará votación

El Presidente de la República, Jorge Batlle, opuesto al entendimiento, observará esta decisión de acuerdo a lo establecido por el artículo 197 de la Constitución, que juzga los actos, en este caso del Directorio postal, y prevé hasta la remoción de sus integrantes.

El martes se reunirán los distribuidores y vendedores de diarios para analizar la situación. Hasta ese día, no habrá un pronunciamiento oficial del sector, adelantó anoche Edie Espert a LA REPUBLICA.

Tras doce horas de deliberación –interrumpida por un cuarto intermedio para que Martínez conversara telefónicamente con Batlle– Osta y Jardim ratificaron el contrato y respaldaron las gestiones del gerente comercial, Mario Pintos. El trabajo de este funcionario contó con el «apoyo» del Directorio, según se señala en la resolución que fue remitida al Poder Ejecutivo.

El presidente Martínez sostuvo que ese contrato todavía no se había firmado. Sin embargo, tanto Osta como Jardim afirmaron lo contrario.

Ambos jerarcas señalaron que es llamativo que el contrato se firmara el 3 de diciembre y «recién el 10″ de ese mes el Poder Ejecutivo se enterara del mismo.

«El Correo actuó a convicción y a Derecho. Hicimos lo adecuado para la empresa en el marco de la búsqueda para mejorar la gestión y bajar los costos de subsidio», manifestó esta madrugada Jardim.

El director blanco dijo que le llamaba la atención la actitud del Poder Ejecutivo en este caso y se mostró preocupado ante la posibilidad de que el hecho se repita en otras negociaciones. «Nosotros estamos en un mercado competitivo y buscamos lo mejor para la empresa», subrayó el jerarca.

Sin embargo, Batlle entiende lo contrario: considera que aprobar este acuerdo sería cambiar «un monopolio por otro», en referencia a la relación comercial entre los periódicos y los distribuidores.

Batlle apelará al artículo 197 de la Constitución que establece que el Poder Ejecutivo puede considerar inconveniente o ilegal la gestión o actos de los directorios. En caso de que se desatienda la observación, «podrá disponer las rectificaciones, los correctivos o remociones que considere del caso» y comunicar el hecho al Senado, que deberá resolver.

Fuentes oficiales señalaron a LA REPUBLICA que el gobierno tiene «varias dudas» respecto a la conformación del contrato.

El acuerdo establecido entre El Correo y las empresas editoras de los diarios El País, El Observador, Ultimas Noticias, y los semanarios Búsqueda y Brecha, indica que el organismo estatal transportaría estas publicaciones desde las imprentas hasta los centros mayoristas de distribución ubicados en Montevideo y Canelones. El acuerdo también comprende el armado, encarte y empaquetado de los diarios, así como la administración y liquidación diaria del producto de la venta. El Correo proporcionaría el personal y los vehículos necesarios para esta tarea, pero no estaría obligado a la entrega y distribución en los centros minoristas. Como contrapartida, en los centros mayoristas de distribución se cobrarían las publicaciones entregadas y se devolvería el dinero de las que retornen.

El acuerdo es por tres años y las editoras pagarían anualmente ocho millones de pesos más los impuestos actuales y los que se creen.

En caso de que alguna de las partes incumpla el contrato, la multa es de 4.500.000 pesos.

Discrepancias

La resolución de este caso terminó por desnudar una compleja situación en la interna del Directorio del Correo. Ayer LA REPUBLICA publicó dichos de Martínez, quien aseguró que los directores Osta y Jardim habían conformado una nueva mayoría.

El director Osta reconoció ayer que existen «diferencias de criterio, de enfoque» con el presidente del Correo. El dirigente descartó que esto sea un enfrentamiento de la interna del Partido Colorado y afirmó que se trata de «dificultades para componer» que tiene, en su opinión, el titular del organismo.

«Ser presidente de un Directorio implica un trabajo de aguja, hay que zurcir, hay que buscar el consenso», dijo Osta a LA REPUBLICA. Afirmó además que Martínez busca «imponer posiciones» y tiene «actitudes un tanto autoritarias desde la presidencia». Jardim reconoció que también ha tenido «diferencias» con el titular del organismo. *