ni olvido ni perdón, siempre justicia

Jorge Rafael Videla: el sádico confeso artífice de torturas, asesinatos y desapariciones en Argentina

La dictadura militar argentina dejó 30.000 desaparecidos y una gran cantidad de asesinatos, torturas y vejaciones. Videla se murió creyendo que había hecho lo correcto. La historia lo recuerda como lo que fue: un continuado violador de derechos humanos.

Jorge Rafael Videla y todos los integrantes de la cúpula militar que dirigió el golpe de Estado en 1976.
Jorge Rafael Videla y todos los integrantes de la cúpula militar que dirigió el golpe de Estado en 1976.

A casi 10 años de la muerte del cruel y despiadado dictador argentino, Jorge Rafael Videla, su paso por la historia del país sigue pesando, y seguirá siendo una carga inconmensurable que yace en la memoria de los más de 30.000 desaparecidos que dejó su dictadura, y los otros miles de perseguidos, torturados y asesinados.

El exdictador argentino falleció en su celda el 17 de mayo de 2013, y desde entonces se mantiene viva la discusión por su legado y la brutal dictadura que lideró durante los años setenta, que inició con el golpe de Estado el 24 de marzo de 1976 y siguió activa hasta 1983.

Aunque han pasado más de cuatro décadas desde su gobierno, la sociedad argentina sigue debatiendo sobre el alcance de la represión, los crímenes cometidos y el impacto que tuvo en la historia del país.

Videla, uno de los más oscuros personajes de la historia reciente argentina

Jorge Videla lideró una de las dictaduras más sangrientas de la historia argentina, caracterizada por la violación sistemática de los derechos humanos. Miles de personas fueron secuestradas, torturadas y asesinadas por motivos políticos o ideológicos. La represión fue tan brutal que algunos sectores de la sociedad argentina llegaron a hablar de un “genocidio” contra los disidentes, pero el término aún se debate. Al margen de esta discusión semántica, los hechos atroces derivaron en que Videla y otros militares que gobernaron con puño de hierro esos años, fueran enviados a la cárcel.

Este proceso fue llevado a la pantalla grande en la multipremiada película Argentina 1985, protagonizada por Ricardo Darín, Peter Lanzani y otros. Marcelo Pozzi le da vida a Videla con una verosimilitud que espanta hasta al más sobrio.

Videla quedó atrapado en su personaje “patriota” hasta el último día

A pesar de las atrocidades cometidas durante su gobierno, Videla vivía congelado en el tiempo. Como si aquellos años “gloriosos” de su carrera militar, en los que llegó ilegítimamente al gobierno nacional, nunca hubieran terminado. Su casa de campo, ubicada en la provincia de Córdoba, parecía haberse detenido en la década del setenta. El mobiliario, la decoración y los objetos personales eran testimonio de la vida lujosa que llevaba el dictador durante su gobierno.

Incluso su forma de vestir y de peinarse seguían siendo las mismas que hace cuarenta años. Mientras estuvo en prisión, se le vio siempre arreglado, peinado y limpio. Siempre con pantalón y camiseta sin arrugas y con zapatillas de vestir o náuticas.

La muerte de Videla generó especulaciones acerca de las circunstancias de su fallecimiento. Algunos sostuvieron que murió a causa de una enfermedad, mientras que otros afirmaron que pudo haber sido envenenado. Pero la versión oficial indica que tenía problemas cardíacos de base en estado avanzado, pero lo que detonó la muerte fue una caída que tuvo el 12 de mayo de ese mismo años, que le dejó fracturas y una hemorragia interna.

Ni olvido ni perdón. Siempre justicia

La dictadura que lideró Videla dejó un legado de dolor y sufrimiento en la sociedad argentina. La lucha por la verdad, la justicia y la memoria sigue siendo una tarea pendiente, hasta que aparezca el último de los desaparecidos.

En la cárcel, expuso sus motivos por los cuales habían ordenado tantas desapariciones: “Para no generar protestas dentro y fuera del país, sobre la marcha se llegó a la decisión de que esa gente desapareciera; cada desaparición puede ser entendida ciertamente como el enmascaramiento, el disimulo, de una muerte”.

“Nuestro objetivo era disciplinar una sociedad anarquizada; volverla a sus principios, a sus cauces naturales. Con respecto al peronismo, salir de una visión populista, demagógica, que impregnaba a vastos sectores; con relación a la economía, ir a una economía de mercado, liberal”, lanzó como toda explicación al plan sistemático llevado adelante por la dictadura.

Pero también trató de deslindarse de la responsabilidad mayor, que siempre recaía sobre él: “No era que esa decisión sobre el destino de una persona la tomaba un cabo. No: había responsables en cada zona, subzona, área y subárea. Pero, por encima de ello, existía la responsabilidad del comandante en jefe del Ejército, tomada en la más absoluta soledad del mando”.

Muchas familias todavía buscan a sus seres queridos desaparecidos durante la dictadura y esperan que se haga justicia por los crímenes cometidos.

 

Te puede interesar

Te recomendamos

Publicá tu comentario

Compartí tu opinión con toda la comunidad

chat_bubble
Si no puedes comentar, envianos un mensaje