CATALUÑA

El Consejo de Europa condena el uso de la fuerza en Cataluña y apuesta al diálogo

El Consejo de Europa apuesta por el diálogo en Cataluña y condenó el uso de la fuerza durante la jornada del referéndum el pasado 1 de octubre.

El Consejo de Europa condena el uso de la fuerza en Cataluña y apuesta al diálogo.
El Consejo de Europa condena el uso de la fuerza en Cataluña y apuesta al diálogo.

El Consejo de Europa realizó una asamblea este jueves para tratar sobre la necesidad de encontrar una solución política para la crisis en Cataluña. La condena a la violencia en la jornada del referéndum, la necesidad del diálogo y el respeto a la ley han sido los temas centrales de la reunión.

El recientemente nombrado presidente de la Alianza de los Liberales y Demócratas por Europa (ALDE), Hendrik Daems, recordó que la libertad de expresión y de reunión es «incompatible» con la «violencia» que observaron el pasado 1 de octubre. Al tiempo que lamentó que «ni Rajoy ni el Rey» hayan hecho referencias a la represión que se vivió ese día.

«No podemos aceptar la intimidación por ambas partes», agregó Daems y criticó los intentos de «segregación en buenos y malos». Según manifestó el Consejo de Europa «ha de tomar partido» y «Madrid y Barcelona han de ofrecer diálogo, dejando de lado su orgullo político y sus cálculos electorales».

También se condenaron los comentarios del vicesecretario de Comunicación del Partido Popular, Pablo Casado, quien afirmó que Puigdemont terminaría como Lluís Company, detenido y fusilado.

Durante la asamblea también hubo referencias al artículo 155 de la Constitución española que Mariano Rajoy ha activado la primera parte esta semana. Para Petra de Sutter, del Grupo Socialista, su aplicación «es lo peor que puede ocurrir».

«La posible salida es enmendar la Constitución para permitir el referéndum. La ley es importante, pero la participación ciudadana es más importante», consideró y abogó una «mediación».

El también socialista Manuel Tornare advirtió por su parte de las «derivas peligrosas» a las que puede llevar la situación. «Está en peligro el futuro de la península ibérica y de Europa», expresó. El británico Roger Gale, del Grupo Conservador, manifestó su convencimiento de que «el pueblo catalán tiene derecho a que se escuche su voz», al igual que ocurrió con los escoceses en Reino Unido.

«Volver a la legalidad»

El Gobierno central de España ha señalado este jueves que si el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, afirma que no declaró la independencia de Cataluña el pasado martes, el Ejecutivo no activaría la segunda fase del artículo 155 de la Constitución. Según expresaron en ese caso la situación política volvería al escenario previo al pleno del Parlament de los días 6 y 7 de setiembre, que aprobó la ley del referéndum y de transitoriedad, ambas suspendidas cautelarmente por el Tribunal Constitucional. El Ejecutivo español aseguró que Puigdemont tiene una última oportunidad de «dejar de jugar con todo el mundo», aunque precisaron que ni propio presidente de la Generalitat sabe aún cuál va a ser su respuesta.


Por su parte los independendistas de la CUP reafirmaron este jueves que no hubo un acuerdo con JxSí para retrasar la declaración de independencia durante 15 días o tres semanas para buscar mediadores y poder «dialogar».

«Ni se consensuó ni se aceptó», aseguraron desde la CUP. El portavoz del secretariado nacional de la CUP, Quim Arrufat, explicó este martes que lo que hizo Puigdemont no era lo que habían hablando, y que la decisión de suspender unas semanas los efectos de la independencia para dialogar se les comunicó poco antes de iniciarse el pleno.

«No era lo que nos había trasladado él mismo. Queda todo modificado una hora antes. Se nos traslada una hora antes y eso ha contribuido más a la confusión», expresó Arrufat.

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