Bill Cosby enfrenta su primer juicio por casos de abuso sexual

El comediante estadounidense, Bill Cosby, icono de la cultura popular estadounidense, se sentó este lunes por primera vez en el banquillo de los acusados, para enfrentar el primero de los juicios por abuso sexual, este contra la canadiense Andrea Constand, una de más de 60 mujeres que aseguran haber sido ultrajadas por la famosa estrella de televisión.

Cosby, de 79 años, se mantuvo en silencio durante todo la primera audiencia que comenzó este lunes, y se celebra en medio de un gran revuelo mediático y fuertes medidas de seguridad en la ciudad de Filadelfia, Pensilvania.

El juicio está pactado para durar unas dos semanas, pero no se sabe si se podría extender, y se centra en la figura de Constand, una mujer que asegura que en una noche del 2004 el artista la invitó a su mansión, ubicada en Chelteham, Pensilvania, y le dio una dosis de pastillas que la marearon, le nublaron la vista y propició que este abusara sexualmente de ella. Está previsto que la denunciante declare, pero no se sabe cuándo será llamada al estrado.

Otras muchas denuncias

Una de las denunciantes, que reservó su verdadera identidad y se hizo llamar «Kacey», habló en la audiencia para contar que, en 1996, Cosby la invitó a un hotel de Los Ángeles, California, en donde la drogó, la inmovilizó y abusó de ella, la misma dinámica que relata Constand, y que se parece al modus operandi que se cuenta en las denuncias de las otras varias decenas de afectadas.

«Bajo el agua, es como sentirse bajo el agua», contestó Kacey, a las preguntas de los abogados acusadores, y aseguró que no consintió el tener relaciones sexuales con el actor.

Treta

La defensa de Cosby tratará de desacreditar a Constand, cuestionando la naturaleza de su relación con el artista, al que conoció en el año 2001 mientras ella entrenaba al equipo de baloncesto de la Universidad de Temple, Pensilvania, a cuya junta administrativa perteneció Cosby durante 32 años.

Cosby sigue rechazando las acusaciones y se declara inocente, aunque admitió haber usado drogas como señuelo para atraer a mujeres, sin que esto fuera, según él, una herramienta para incapacitarlas y tener relaciones sexuales no consensuadas.

Ahora, sin embargo, el artista está acusado de tres delitos de abuso sexual, que acarrean cada uno de ellos una pena máxima de 10 años de cárcel y una multa de US$25.000.