DEFENSA

Dilma Rousseff ante el Senado: «No lucho por mi mandato por vanidad o por apego al poder, lo hago por la democracia, por la verdad y por la justicia»

Dilma Rousseff aseguró durante su defensa ante el Senado "jamás atentaría contra lo que yo creo o practicaría algún acto que sea contrario a los intereses de los que me eligieron" y instó a los senadores a defender la democracia y votar contra el impeachment.

Dilma Rousseff ante el Senado: : "No lucho por mi mandato por vanidad o por apego al poder, lo hago por la democracia". Foto: EFE
Dilma Rousseff ante el Senado: : «No lucho por mi mandato por vanidad o por apego al poder, lo hago por la democracia». Foto: EFE

La presidenta constitucional de Brasil, Dilma Rousseff, reelecta en 2014 con el voto de más de 54 millones de brasileños compareció este lunes ante el Senado para presentar su defensa en el marco del impeachment que puede destituirla definitivamente. La mandataria se encuentra suspendida de sus funciones desde el pasado 12 de mayo cuando se inicio el proceso en su contra que finalizó en el juicio político que se está llevando a cabo en su fase final desde el pasado jueves 25 de agosto.

Durante su defensa, en un discurso de aproximadamente 40 minutos, Rousseff aseguró que al ejercer la presidencia de la República ha respetado fielmente el compromiso que asumió delante de la nación y las personas que la eligieron y destacó que siempre ha creído en la democracia como el estado de derecho y considera a la Constitución de 1988 como de las más grandes conquistas del pueblo brasileño por lo que «jamás atentaría contra lo que yo creo o practicaría algún acto que sea contrario a los intereses de los que me eligieron».

«Al ejercer la presidencia de la República he honrado el compromiso que asumí con mi país, con la democracia y el estado de derecho. He sido intransigente en la defensa de la democracia», dijo Rousseff, quien preparó su defensa junto a su padrino político Lula da Silva y otros asesores. Dilma es acusada de alterar el presupuesto del Estado sin autorización del Congreso y de peticiones de créditos a bancos públicos.

Por la democracia

La mandataria afirmó ante el Senado: «No lucho por mi mandato por vanidad o por apego al poder» sino que «lo hago por la democracia, por la verdad y por la justicia». Rousseff, recorrió su trayectoria personal, y aseguró que entre sus defectos «no están la deslealtad y la cobardía» y mucho menos la traición con los que luchan a su lado.

En ese sentido recordó que por muchos años sufrió la prisión y contó «Vi compañeros mientras eran violentados y hasta asesinados. Era muy joven, tenía mucha esperanza en la vida. Tengo secuelas de tortura en el cuerpo y el alma, pero no cedí y resistí, resistí las tempestades del terror. Continué luchando por la democracia».

Y aseguró que pese a todo, los acontecimientos favorables y adversos, luchó por una sociedad libre de perjuicios y humillaciones, “por un Brasil soberano donde existiera la equidad y justicia». Y reconoció que frente a las acusaciones que se le hacen “no puedo dejar de sentir la injusticia y es por eso que igual que en el pasado estoy resistiendo”.

Tal como había adelantado en los días previos Dilma dijo a los senadores: «Vengo a mirar en los ojos a sus excelencias y decirles que no cometí el delito de responsabilidad» del que se me acusa, e insistió en que las acusaciones en su contra «no pasan de pretextos, basados en una frágil retórica jurídica para derrumbar un gobierno electo».

Dilma recalcó que «Lo está en juego en el ‘impeachment’ no es mi mandato, es el respeto a las urnas, a la voluntad del pueblo y a la Constitución».

Y volvió a sostener: «Seré juzgada por un crimen que no cometí. Tengo mi conciencia absolutamente tranquila por lo que hice» y advirtió «estamos a pasos de cometer un verdadero golpe de Estado», por eso instó a los senadores, que serán quienes la juzguen: «Voten contra el impeachment, voten por la democracia».

Al terminar su defensa ante el Senado, se dio lugar a los senadores que tienen cinco minutos cada uno para hacerle preguntas a la mandataria que puede responderlas o no.

El resultado final del impeachment se conocerá entre el martes 29 y miércoles 30 de agosto tras una votación definitiva donde la acusación debe obtener 54 votos de los 81 senadores para concretar la destitución de la presidenta, mientras que si no se alcanza esa cifra Dilma será absuelta y regresará al poder. En caso de darse la destitución, Michel Temer, quien ocupa su lugar desde el mes de mayo de manera interina sería confirmado como presidente el resto del mandato hasta el 2018.

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