Papa busca paz en Medio Oriente a través de los palestinos; en Israel lo califican de “ingenuo”

“Las santas son ejemplo de misericordia, caridad y reconciliación, para que los cristianos de estas tierras miren con esperanza al futuro, continuando en el camino de la solidaridad y la convivencia fraterna,” dijo el pontífice, aunque sin apuntar particularmente a musulmanes y judíos sobre el asunto. Dos mil personas viajaron desde Medio Oriente para concurrir a la canonización del domingo, buena parte de ellas autoridades religiosas de máximo relieve.

La declaración se sumó a un nuevo encuentro, breve e informal, con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, a quien había recibido el sábado en audiencia privada en el Vaticano y de quien dijo es un “ángel de la paz”. El invitado es agasajado apenas horas después que El Vaticano reconoció al Estado Palestino, tras lo que ahora se aguarda la firma de notas reversales de ambos países.

Israel descarga contra la idea de pacificación papal

La frase del papa “Usted es un ángel de la paz”, dirigida a Abbas tuvo fuerte repercusión en Israel. El diario de mayor tiraje israelí -Yediot Ahronot- dijo en primera plana que “O Su Santidad es una persona muy ingenua o bien no tiene la más mínima idea de lo que sucede en Medio Oriente desde hace 70 años”.

Por su parte el máximo rabino de Roma, Riccardo de Segni, publicó en Twitter: “Todos tenemos necesidad de ángeles de la paz, pero deben ser ángeles verdaderos y paz verdadera”.

Alguna fuentes romanas, afirman ahora que el Vaticano estaría dispuesto a reconocer un supuesto error de traducción de a frase atribuida al papa Francisco. En vez de calificarlo como “usted es un ángel de la paz”, el pontífice habría dicho el imperativo “Sea un ángel de la paz”, pero el asunto no está aún dilucidado.

Mientras tanto en Palestina, ha habido muestras de reconocimiento por la comparecencia de Habbas en Roma, además de la canonización el domingo a las dos primeras santas del país.  Las dos monjas palestinas –canonizadas junto a otras dos: una francesa y una italiana– son Marie Alphonsine Danil Ghattas, nacida en Jerusalén en 1843, fundó la orden de religiosas San José de la Aparición, el Instituto de las Hermanas del Santo Rosario, la primera congregación de Tierra Santa. María de Jesús Crucificado. Marian  Bawardy nacida en 1846, en Galilea, quedó huérfana y tras ser obligada a un matrimonio forzado entró en el convento de las Carmelitas Descalzas.

“La hermana Bawardy, aunque humilde y analfabeta, sabía cómo dar consejos y explicaciones teológicas con gran claridad, fruto del diálogo continuo con el Espíritu Santo. La docilidad al Espíritu Santo la ha hecho instrumento de encuentro y comunión con el mundo musulmán”, sentenció Francisco.