Berlusconi absuelto de prostituir menores, vuelve a la política “por una Italia mejor, más justa y libre”
El multimillonario político italiano, Silvio Berlusconi, decidió volver a la arena política a sus 78 años, apenas después de conocerse su absolución definitiva de los cargos por el “Caso Ruby”, donde se le había procesado por incitación a la prostitución de menores. Berlusconi enfrentaba hasta siete años de cárcel por ese cargo al que se sumaba otro de “abuso de poder” y por los que fuera procesado en primera instancia.
“Hoy” Italia es un país mejor. Ahora, archivada también esta triste página, estoy de nuevo en el campo de juego para construir, con Forza Italia y con el movimiento de la centroderecha, una Italia mejor, más justa y más libre”, dijo Berlusconi a las puertas de su palacio romano, donde la prensa esperaba oir su eventual renuncia a la carrera política ante el rechazo popular –y de su partido- a la absolución final. Berlusconi, se libró por un indulto de seguir cuidando enfermos de Alzheimer, en las afueras de Milán, pena que debía purgar. El fallo implicaba que Berlusconi no tenía más fueros senaturiales y estaba expulsado del Parlamento al menos por seis años.
Sin embargo Berlusconi debe aún enfrentar dos causas judiciales vinculadas: una por la compra de testigos en el caso Ruby –las jóvenes que iban a las fiestas argumentaron no acordarse de nada- y otra por sus vínculos con Gianpaolo Tarantini, el hombre que le enviaba las chicas masajistas para aliviarle el lumbago, según atestiguaron los dos amigos.
Políticamente sin embargo el canto de victoria de Berlusconi, no parece esta vez ir acompañado por el de sus propios legisladores de Forza Italia. Un grupo del partido acaba de apoyar las reformas del primer ministro Matteo Renzi, del Partido Democrático, algo que había sido rechazado de plano por “Il Cavalieri”.
El centro derecha quiere dejar atrás el pésimo recuerdo
Los legisladores y dirigentes jóvenes de la centro derecha italiana, apuntan con esta negativa a acatar a su líder a dejar atrás el pésimo recuerdo de la imagen de Berlusconi, además de ponerse a salvo ante un eventual nuevo procesamiento en las causas que aún enfrenta.
A nivel de la población en general, casi nadie cree realmente que Berlusconi sea inocente de las fiestas palaciegas donde Karima El Marough –conocida en el ambiente nocturno milanés como Ruby Robacorazones- siendo menor de edad satisfacía los deseos del entonces jefe de Gobierno de Italia.
La marroquí y sus amigas disfrutaban prebendas de todo tipo del magnate, y además tenían protección extraordinaria en casos de necesidad. Ello fue probado cuando Ruby le robó a una compañera de piso, y fue detenida por la Policía. Berlusconi llamó desde Paris y pidió a los agentes que la dejaran en libertad (aduciendo que era la sobrina del presidente de Egipto Hosni Mubarak), todo lo que fue ratificado por los uniformados.
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