Precio de combustibles en caída libre: producción supera consumo y depósitos están repletos

Según el último informe del Departamento de Energía, en las últimas siete semanas Estados Unidos ha producido un promedio diario de un millón de barriles por encima de lo que consume, un excedente que sitúa las cotas de reserva en las más altas de los últimos ochenta años. Pero lo que en otros momentos hubiera sido un índice auspicioso, ahora se convierte en pesadilla, ya que la única opción parece ser que un derrumbe de petróleo, y la consecuente caída del precio de los combustibles, estimule el consumo familiar y doméstico en general. El litro de gasolina en Estados Unidos, se sitúa en los 0,6 dólares por litro (2,44 dólares el galón), unos 25 centavos más barato cada litro que hace un año.

Algunos estiman que el barril caerá de 50 dólares a 20 dólares

Los analistas sin embargo no logran coincidir en los números que anticipan para los precios a futuro inmediato, en tanto suman o quitan aspectos referentes a la explotación e industrialización del recurso. Para algunos la gasolina deberá caer paralelamente a como lo haga el petróleo, aunque otros afirman que los intermediarios sostendrán los precios hasta el último momento. En materia de crudo, el mercado es más duro todavía y los precios del barril podrían caer incluso hasta los 20 dólares –de los 50 aproximados en la actualidad- pero no todos se muestran en esa línea de ideas.

Algunas pautas son que la producción de petróleo en territorio estadounidense, sigue creciendo, y aunque no hay nuevas perforaciones, el invierno muy duro permite que la oferta se mantenga. Continúan las compras de petróleo en el exterior, alimentando las refinerías de crudo pesado: el norteamericano es básicamente liviano y muchas refinerías no pueden trabajar con él. El mercado especulativo sigue comprando a 50 dólares, con la expectativa de alcanzar hasta 60 en los próximos meses, algo para lo que ha previsto inversiones de máximo rango, que habiliten la operativa necesaria.