El director franco-israelí Fréderic Chaslin, anticipó a la dirección de la Ópera de Tel Aviv que dirigiría una palabras al público, antes de la función, y acto seguido interpretaría como apertura el Himno Nacional israelí. Sin embargo los directores del máximo centro de música de la capital, prohibió cualquier tipo de referencia durante o antes de la función a la masacre ocurrida en París.

Por toda respuesta el director y compositor judío, dejó plantado al auditorio y no dirigió “La Rondine” de Puccini, como estaba previsto.

Las controvertidas opiniones de los protagonistas

«Todo el pueblo de Israel está consternado por los atentados contra la revista y la comunidad judía por lo que no entiendo la decisión de los responsables. ¿Qué medidas son éstas? ¿Han perdido el alma?”, enfatizó el director en declaraciones a la prensa israelí, poco después de conocida su decisión.

Chaslin, tendrá un papel clave en los actos conmemorativos del Día Internacional del Holocausto, que se conmemora el próximo 26 de enero y este año coincide con los 70 años de la liberación del campo de concentración de Auschwitz. Chaslin es hijo de sobrevivientes del Holocausto.

Por su parte la administración de la ópera explicó en un comunicado que “a la Ópera israelí le duele la tragedia y sus resultados. Su corazón está con el pueblo francés y la comunidad judía. En sus 30 años de existencia, la Ópera ha mantenido su rutina incluso en los dolorosos días de decenas de ataques terroristas y también durante las guerras. Ésta es la forma de actuación de la Ópera, no permitir que el terrorismo gane y altere la rutina de nuestras vidas”.