Canciller alemana Ángela Merkel apela a la unidad de Europa a 25 años de la caída del Muro de Berlín

La caída del Muro de Berlín que había dividido en dos a Alemania, se produjo el 9 de noviembre de 1989, y significó el principio del fin de la “cortina de Hierro” y el punto final de un emblema de la Guerra Fría.

Hace un cuarto de siglo, 20.000 personas cruzaron hacia el oeste de Alemania sin documentación, mientras se derrumbaba lo que había divido a los alemanes desde 1961.

Este domingo la canciller alemana, Angela Merkel, expresó, en el marco de los festejos por el 25 aniversario de la caída del muro, que su destrucción es un “mensaje de confianza para los diferentes focos de crisis en el mundo”.

En el Centro conmemorativo del Muro de Berlín en la Bernauer Strasse -la calle que simboliza la partición ciudadana-, Merkel recordó que las “imágenes de la caída que dieron la vuelta al mundo, eran el anuncio del fin de la división de Berlín, de Alemania y de Europa, y el fin de la Guerra Fría”.

“Este centro conmemorativo transmite también la gran suerte y regalo que constituye el poder vivir unidos y de forma pacífica en nuestro continente, en una estructura económica y social a la que van ligadas libertad y responsabilidad”, agregó la autoridad alemana.

En ese sentido, agregó que se pueden cambiar las cosas  para mejor y ese es el mensaje “de la caída del muro”.

Durante la inauguración de una exposición permanente sobre la vida diaria detrás del muro que dividió a Berlín durante 28 años, la jerarca de gobierno indicó que es un “mensaje de confianza que va dirigido tanto a Alemania como al resto de Europa y del mundo”.

En tal sentido, mencionó en especial “a la gente en Ucrania, en Siria, en Irak y en muchas otras regiones de nuestro planeta donde la libertad y los derechos humanos están siendo amenazados e, incluso, pisoteados”.

Otros muros

Merkel cuestionó que hoy otros muros: “de la dictadura, de la violencia, de las ideologías, de las enemistades, los que pueden ser derribados ahora y en el futuro”.

“La caída del muro nos enseñó que los sueños se pueden hacer realidad, que nada debe permanecer tal y como está, por muy grandes que sean los obstáculos”, sentenció.

La canciller alemana también honró la memoria de todas las víctimas de la división alemana, y recordó los fracasados intentos de huida.

“El muro de Berlín, este símbolo de cemento de la arbitrariedad de un Estado, abocó a millones de personas al borde de lo soportable y a demasiados, todavía más allá. La República Democrática Alemana (RDA) fue todo menos un estado de Derecho”, remarcó.

Agregó: “Todo aquel que visite el centro conmemorativo de la Bernauer Strasse entenderá lo importante que es, también 25 años después de la caída del muro, hacer revisión de la dictadura del Partido Socialista Unificado (SED) y continuar calificando la injusticia”.

Previó a los actos públicos en Berlín, Merkel asistió a una misa en memoria de las víctimas en la Capilla de la Reconciliación, situada donde se encontraba la llamada franja de la muerte.

Antes del oficio religioso, la canciller y otros invitados colocaron rosas en recuerdo de las víctimas entre los bloques del antiguo muro en el centro conmemorativo.