Video de celular: segundo joven que mató policía de Saint Louis estaba desarmado
La Policía de Saint Louis afirmó que el segundo joven negro que mató en Saint Louis estaba armado y era “amenazante” pero un video de un teléfono muestra todo lo contrario.
Los policías de Saint Louis fueron alertados que un afroamericano había robado algunas “donuts” y refrescos de una tienda, cuyo dueño había llamado a los patrulleros. Varios vecinos habían visto ya a Kajieme Powell, de 25 años, en actitud errática en la vereda, aunque sin atisbos de violencia ni de insultos o similares.
Sin embargo alguno decidió empezar a grabarlo con su teléfono celular.
Un par de minutos después llega el patrullero policial, Powell es convocado y cuando se está aproximando al vehículo, los agentes le disparan nueve tiros y lo liquidan. Desde que llegó el patrullero hasta que cae muerto el joven pasan menos de 15 segundos.
El jefe de la Policía Metropolitana de Saint Louis, Sam Dotson, había dicho tras el incidente que los agentes abrieron fuego cuando el joven estaba a menos de un metro de los agentes, blandiendo un cuchillo y sin responder a las órdenes de los policías.
El video demuestra que cualquiera de los tres argumentos, es falso.
Pese al video el jefe de Policía insiste en defender a sus agentes
El video que muestra al ahora fallecido aproximándose a los policías como le pedían, con las manos bajas y sin ningún cuchillo a la vista, pauta que además lo acribillaron a unos cinco metros por lo menos de distancia.
El jefe de Policía dijo no obstante que los nueve tiros “están justificados: cada agente tiene derecho a defenderse a sí mismo y a la comunidad”.
El video muestra además como de inmediato llegan otros patrulleros, que intentan evitar más grabaciones, expulsan a los vecinos del lugar y rodean el perímetro a más de media cuadra con cinta amarilla que prohíbe el paso.
Poco después decenas de vecinos se congregaban en las inmediaciones reclamando seguridad ante las acciones de la Policía. La ejecución ha tenido lugar a menos de siete kilómetros de donde Mike Brown, el primero de los asesinados fuera ultimado por un policía blanco, desatando una repulsa popular cuyas manifestaciones se han extendido a por lo menos cuarenta ciudades en Estados Unidos.
Compartí tu opinión con toda la comunidad