Estado de Irak y Levante (EIIL) declara el califato y “objetivos mundiales” tras crucificar opositores y repeler ataque de EE.UU

Desde Bagdad se había dado como un hecho que la contraofensiva, cuyo objetivo principal era recuperar la ciudad de Tikrit, tendría éxito basándose en el apoyo estadounidense que aportaba drones con misiles y aviones cazabombarderos. Rusia apoyó también con diez aviones de combate Su-24. Sin embargo la ciudad –a 160 kilómetros de Bagdad- seguía en medio de fuertes combates de artillería en la mañana del lunes y no parecía que fuera a caer en las próximas horas.

Los iraquíes combatientes aparecen aterrorizados tras la difusión de lo que los yihadistas están haciendo con los opositores: crucificarlos hasta que se desangren en las plazas públicas, a modo de ejemplo aleccionador. Al menos cinco personas sufrieron el martirio que fue distribuido en Internet, en los últimos días.

Declarado el califato, la idea es la expansión en el mundo

El Estado Islamista de Irak y Levante (EIIL) declaró ahora el califato, una forma de gobierno inspirada en el profeta Mahoma, que exige lealtad de los demás países musulmanes. El EIIL tiene ahora una faja de terreno sunita, en medio del gobierno chiíta, y se han borrado todas las expectativas de compartir el poder en el país, después de las matanzas y las crucifixiones. “Escuchen al califa y obedezcan: el Estado crece día a día”, dijo el portavoz del grupo terrorista al exigir lealtad al jefe supremo, Abu Bakr al Baghdadi, al que proclaman como heredero directo del profeta Mahoma.

“Califato”, (sucesión, en árabe) es el sistema que acordaron los seguidores de Mahoma tras su muerte en 632, y da al califa la jefatura de la nación y de la comunidad musulmana internacional, además del poder de aplicar la ley islámica. Chiítas y sunnitas están profundamente divididos por la interpretación de ese legado.

Mientras tanto en las últimas horas, los terroristas hicieron conocer un mapa donde exhiben sus metas “a controlar en un plazo de cinco años”. España, Grecia, los países de los Balcanes. Oriente Medio, África en la mitad norte del continente, y los territorios asiáticos desde Rusia hasta China e India, son los objetivos según publica el diario británico Daily Mirror.