Microsoft, Sony y Nintendo autorizadas a vender sus videojuegos en China

Las autoridades de Pekín habían prohibido en 2000 la importación de consolas con videojuegos extranjeros, en el entendido que lo programado en los países capitalistas podía tener efectos adversos “sobre la salud mental” de la juventud china.

Los juegos prohibidos han hecho que aquellos que vienen ya en las PC, se hayan convertido en absolutamente populares entre la población juvenil y dejaron de lado varios programas de entretenimiento que el gobierno había planificado como lo mejor para los descendientes de la Revolución.

El Consejo de Estado –que había adelantado ya en Septiembre pasado la posibilidad de la medida- dijo ahora que la importación es posible aunque con restricciones de control. Tampoco se sabe por cuanto tiempo la medida estará vigente, ni los requisitos a que deberán someterse los extranjeros para entrar al multimillonario mercado.

El crecimiento exponencial de un mercado todo potencia

El mercado de los videojuegos en China, creció un 38% desde el año 2012, pero las dos terceras partes de los juegos siguen siendo en la computadora. Los juegos en la Internet representan algo así como el 15%, aunque se estima que pueda ser una cifra inferior a la realidad ajustada. En los móviles, el 13% de los chinos muestra interés por estos juegos.

A los efectos de mercado resulta sumamente paradójico que las consolas que estaban hasta ahora prohibidas en China, sean las mismas que se fabrican en el país. Sony, Nintendo y Microsoft, tienen sus principales plantas de fabricación instaladas en China, desde donde exportan a todo el mundo.