CONSAGRADAS A CRISTO

Vírgenes consagradas no deberán ser realmente vírgenes, ordena el Vaticano

Las llamadas "novias de Cristo" no deberán ser físicamente vírgenes para poder ser vírgenes consagradas según dictaminó el Papa Francisco esta semana. El anuncio ha despertado el enojo de aquellas que han conservado su estado virginal literalmente.

Un grupo de vírgenes consagradas con el obispo de Córdoba, España. Foto: Archivo / Diócesis de Córdoba
Un grupo de vírgenes consagradas con el obispo de Córdoba, España. Foto: Archivo / Diócesis de Córdoba

Un documento publicado a principios de este mes por el Vaticano y firmado por el sumo pontífice dice que una mujer no necesita haber «mantenido su cuerpo en perfecta continencia sexual» para convertirse en una virgen consagrada.

El documento, titulado Ecclesiae Sponsae Imago, dice que el «llamado a dar testimonio del amor virginal, esponsal y fructífero de la Iglesia por Cristo no se reduce al símbolo de la integridad física» y que no es un «requisito» haber mantenido el cuerpo en absoluto estado virginal.

Las mujeres que desean ser consagradas como vírgenes participan en una ceremonia en la que se visten de blanco y se entregan a Cristo. Una vez que se han unido a la vocación, usan anillos de boda y no pueden casarse ni tener relaciones sexuales. Se cree que hay alrededor de 5.000 de ellas en todo el mundo. 

Decepcionadas

La Asociación de vírgenes consagradas de Estados Unidos emitió un comunicado en el que calificó el documento de «profundamente decepcionante» y dijo que lo estipulado es «impactante».

«Toda la tradición de la Iglesia ha sostenido firmemente que una mujer debe haber recibido el don de la virginidad, es decir, material y formal (carnal y espiritual), para recibir la consagración de las vírgenes», aseguró la organización que agrupa a unas 200 estadounidenses.

La declaración cita un documento anterior, «Consagración a una vida de virginidad», que dice que las mujeres que se convierten en vírgenes consagradas deben haberse «nunca casado o vivido en público o abierta violación de la castidad».

El nuevo documento, que se puede considerar como un reglamento, dice que las mujeres pueden dejar la vocación de la castidad «por razones muy serias» si se presentan por escrito con el escrito correspondiente. Asegura que se necesitan al menos dos años de consagración y haber cumplido al menos 25 años de edad antes de poder consagrarse como «esposa de Cristo».

Las órdenes de las vírgenes estuvieron presentes en la Iglesia Católica primitiva, pero se extinguieron desde la época medieval antes de ser revividas en 1970 bajo el liderazgo del Papa Pablo VI.

A diferencia de las monjas, las otras no deben vestir ropas especiales ni vivir en conventos; pueden formar parte del mundo secular aunque muchas de ellas optan por vivir en reclusión, oración y contemplación gran parte de su vida.

 

Te recomendamos

Publicá tu comentario

Compartí tu opinión con toda la comunidad

chat_bubble
Si no puedes comentar, envianos un mensaje