Cierran subcomisaría argentina por aparición de un duende satánico

El puesto policial está ubicado en la localidad de Banda Varela (provincia de Catamarca, noroeste), donde el cabo Miguel Angel Agüero (37 años) afirmó haber visto un «enano» o «duende», con el que habló, y le dijo que había ido a buscarlo «de parte de Satanás», relató el matutino local El Ancasti.

Oficialmente, la Policía anunció el cierre provisional de la dependencia y que decidió colocar a dos agentes de consigna durante la noche. Nadie acepta el puesto. Según publicó El Ancasti, el suboficial fue internado en estado de shock por una crisis nerviosa producida, aparentemente, por la «aparición».

El cabo –10 años de servicio y campeón juvenil de maratón en esa provincia– fue encontrado desmayado sentado en una silla, con los ojos abiertos y mirando el techo.

Cuando sus camaradas lograron hacerlo reaccionar, el policía comenzó a gritar como poseído: «Ahí está, ahí está; me viene a buscar», señalando al vacío, explicó el diario. Una comisión policial, que arribó al lugar, se encontró con la insólita situación, en la que el agente presentaba signos de alteración «agudos», dijo el parte policial.

El duende es una de las figuras mitológicas más extendidas en el folclore de las provincias del noroeste argentino, sus «apariciones» son comunes y siempre lo describen igual: pequeño, a veces con sombrero, ropas oscuras y una mirada de ojos rojos y penetrantes.

Agüero describió al supuesto emisario del Belcebú como «una persona, no sé si un hombre, con los ojos rojos, muy rojos, con la cara deformada, horrible, con granos.

No me llegaba a la cintura, tenía un pantalón negro y un buzo o una camisa verde. La ropa, toda sucia. Tenía los ojos rojos, saltones, y la cara, horrible». (AFP)