Yogur casero, natural, fresco y 100% apto para intolerantes a la lactosa

Ingredientes:

1 taza de anacardos crudos

600gr de probióticos (3 cápsulas aprox.)

3 cucharadas de semillas de sésamo crudas

1 ½ vasos de agua

Opcional para saborizar:

Frutas, como arándanos, moras, fresas, piña.

Orejones

Canela

Cacao

Extracto de vainilla

Endulzante a elección, como estevia, azúcar de coco, yacón, panela, etc.

Preparación:

Lo primero es poner los anacardos y las semillas de sésamo en remojo unas 8-10 horas. Colocándolos en un bol con agua, se debe tapar con papel film para activar las enzimas de los alimentos y hacer sus proteínas más asimilables.

Al día siguiente, pasadas las 10 horas, colamos las semillas y los anacardos y vertemos todo en la batidora o licuadora. Agregar el agua y los probióticos, y batir hasta obtener una mezcla homogénea.

Verter la mezcla en frascos de cristal con tapa, y envolverlos con trapos de cocina o toallas viejas, para mantener el calor. Luego poner cerca del radiador, estufa, o al horno a una temperatura de 40°C. Es importante tener en cuenta que a menor temperatura, las bacterias no actúan, y una temperatura superior las mata.

A las 5 horas, el yogur ya estará listo para comer. Si se quiere lograr una consistencia más espesa, se puede esperar más, pero nunca más de 12 horas o el yogur quedará demasiado ácido.

Reservar en la heladera.

Para saborizar, trozar, moler o picar los ingredientes escogidos y agregarlos al yogur al momento de consumir.