Loco… ¿quiénes son los cuerdos?

En el entendido de que los conceptos se fijan por reiteración real, como hace nuestra condicionamiento educativo que año tras año se encarga de repetir una y otra vez determinados conceptos, y de que aun disponiendo de un increíble medio de información como internet, la mayoría prefiere quedarse con lo que le vienen contando desde su niñez, es que vuelvo a referirme a una de las mayores mentiras que le han contado a nuestra civilización, y que entre otras mentiras como la creación de dinero desde la nada por parte de la Reserva Federal, también contribuye a que nuestro planeta y la humanidad se encuentren profundamente enfermos.

El planeta Tierra, como organismo vivo que es, aunque ciertamente mucho más vasto y complejo que un homo sapiens, se ha visto severamente trastornado por la actividad del hombre, quien le ha perforado las entrañas para extraer diversos minerales, ha diezmado la población de árboles en bosques y selvas, empobrecido la tierra al sembrar especies como el eucaliptus, y contaminado casi hasta el punto del envenenamiento tierra, agua y aire, con diversos fluidos, gases y hasta partículas radiactivas cuyo tiempo de vida en la atmósfera puede llegar a ser en algunos casos miles de años. Por su parte la humanidad, como especie habitante de nuestro planeta, es víctima y victimario de su condición de depredador supremo, que se multiplica sin conciencia de que cualquier exceso que se produzca en nuestro medio ambiente genera no solo lógicas consecuencias en la vida de todos los seres, sino que además, puede causar violentas reacciones por parte del organismo vivo que habitamos. Desde luego, tal vez esto sea algo lógico si pensamos cuánta razón tiene el Sr. Smith al calificarnos como un virus que destruye todo su alrededor, en lugar del mamífero que se adapta a su entorno.

Como quiera que sea, y procurando no extender demasiado esta especie de coloquio, que podría irse por las ramas durante algún tiempo para regresar luego al punto de partida, ya que es apenas una simple reflexión producto de estar colocado en medio de mi patio durante la mañana del último domingo de este agosto casi primaveral que estamos teniendo, y de estar estrenando mi lector de libros electrónico con el cual estaré contribuyendo al medio ambiente al dejar de comprar libros de papel madera, con la relectura del ebook “El emperador está desnudo” de Jack Herer, es que vuelvo a lo del comienzo, es decir, a la repetición de un concepto mediante la forma escrita.

Tal vez el concepto más asombroso revelado por Jack Herer sea que el cáñamo es, ampliamente, el principal recurso renovable de la Tierra, pudiendo cultivarse en casi cualquier condición de clima o terreno. Pertenece a la familia vegetal más avanzada del planeta, es una dioica (o dioecia) con macho, hembra y hermafrodita, herbácea y leñosa anual que puede crecer hasta los seis metros de altura en poco tiempo, aprovecha el sol en forma más eficiente que casi cualquier otra planta y posee la fibra suave natural más fuerte y de más larga duración del planeta. Todo esto hace al cáñamo, por increíble que puede parecer, capaz de sustituir a la mayoría de los productos papeleros y textiles del mundo, además de poder cubrir las necesidades energéticas de transporte, industria y vivienda a nivel mundial, al tiempo de contribuir en la reducción de la contaminación, con la limpieza de la atmósfera (por su alto consumo de CO2 al crecer), el enriquecimiento del suelo y la recuperación de aguas contaminadas.

Si el cáñamo volviera a ser, como lo fue durante tres mil años, el principal recurso de explotación, y la actividad humana girase en torno a su cultivo e industrialización, cambiaría la realidad mundial a todos los niveles, tanto en lo medio ambiental como en la situación geo política, social y económica. Los conflictos bélicos y económicos que se generan en la búsqueda del control de los recursos petroleros no tendrían razón de ser, ya que la materia prima estaría disponible en cualquier región del planeta y cada país sería propietario de la fuente de recursos necesarios para su desarrollo, como combustibles, maderas, plásticos, papel, telas, materiales aislantes y componentes para carrocerías de automóviles, pinturas, fertilizantes, alimentos y medicamentos entre muchos otros, ya que todos estos bienes de consumo pueden obtenerse a partir del cáñamo. Y, como si esto fuera poco, los costos de producción y el daño medioambiental se verían disminuidos de forma notoria. Se puede afirmar tranquilamente entonces, que no existe nada en el planeta que pueda siquiera compararse a esta planta, que supo ser reina de los cultivos e industria durante tres milenios.

Claro, las grandes decisiones están en manos de las grandes corporaciones, que además de poseer el control del sistema financiero y la gran mayoría de los recursos naturales del planeta, dictan las políticas mundiales que establecen el camino a seguir por los diferentes gobiernos del mundo, lo cual es lo mismo que decir que los habitantes de la Tierra somos controlados por una élite gobernante. Aunque las cartas están echadas sobre la mesa desde hace décadas, fue solo en estos últimos diez años (cuando internet hizo irrupción en nuestras vidas) cuando hemos podido acceder a informaciones y datos que antes solo eran accesibles a unos pocos. Desde luego que, además de ser una herramienta importante para el conocimiento, la Red es también la herramienta de control social más importante que se ha creado, y todo parece indicar que nos encaminamos a un sistema global de información electrónica que incluirá todos los datos importantes de los habitantes, como ser identidad, historial médico, información personal, cuenta bancaria, pensamientos, aficiones, gustos, costumbres y hasta la exacta ubicación física en el espacio terrestre de cada uno de nosotros, entre otras cosas, aunque en estos momentos recién estamos por comenzar la experiencia con la inclusión financiera, el futuro documento de identificación, que incluirá un chip electrónico, la informatización de los datos clínicos de todos los beneficiarios del sistema de salud y las video cámaras de vigilancia, que seguirán creciendo y multiplicándose en las esquinas.

En lo personal, lejos de ser algo que me produzca inquietud, porque no tengo nada importante que ocultar, creo que es el lógico camino que seguiremos como especie, ya que con cada década transcurrida en el último medio siglo nos hemos hecho cada vez más dependientes de la energía eléctrica y su amplia gama de productos electrónicos, y no está lejano el tiempo en que el cuerpo humano adopte como algo tan normal como lo es la adquisición de un celular hoy en día, componentes o dispositivos electrónicos insertados quirúrgicamente en su anatomía, así como la conexión neuronal con realidades virtuales de diversa índole.

Como era de esperar me fui un poco por las ramas, algo fácil de suceder cuando se comprende que todo tiene relación con todo, y también que todo es posible. Pero, como la finalidad de este proceso intelectual que convertido a ceros y unos estará disponible para ser leído en idioma español en alguna página de internet, no es hablar del Taoísmo ni del sistema mundial que nos gobierna ni de nociones aparentemente propias de ciencia ficción, sino que tiene como propósito realizar un simple comentario acerca de las primeras tres página que he leído en el libro antes mencionado, siendo además, causa y efecto del uso racional y responsable de la substancia psicoactiva que poseen las flores de las hembras de la especie vegetal Cáñamo o Cannabis a la que se refiere dicha obra y, en el entendido de que considero alcanzado el objetivo, doy por finalizado esta tercera entrega acerca de la marihuana y alguno de los peligros que conlleva su uso.

No faltará quien esboce una crítica basada en que un familiar, vecino o conocido de un conocido de 16 años tuvo problemas al consumir en forma excesiva, en la grave situación generada por la violencia en torno del narcotráfico o simplemente tildando a los consumidores de THC como “faloperos asquerosos y descerebrados que deberían estar presos encerrados en un manicomio o muertos porque se endrogan y salen a robar y violar niños y ancianas”, como algún comentario que he leído, de gente que comenta las noticias de los diarios en internet.

“¡Loco!, si esos son los cuerdos, ¡yo estoy loco!”, decía parte de la letra de una banda uruguaya de los años ochenta, llamada “Dellanuka”. ¡Y qué razón tienen! Ya que estamos, introduzco como final la letra de su tema “Quiénes son los cuerdos”, el cual creo viene muy bien como colofón de este colocón.

Quiénes son los cuerdos

No me digas que estoy cuerdo, que capaz que me lo creo
quiero loca mi cabeza, otros son los que están cuerdos.

Los que fijan mi salario, los que tienen el poder
los que salen en los diarios, los que matan por deporte
los dueños de la TV, los que exigen que los voten.

Loco, si esos son los cuerdos yo estoy loco.

Los que estudian en los libros, el derecho y la moral
los que salen en sociales, los que fabrican el hambre
los que transan y es legal, los que tienen guardaespaldas.

Loco, si esos son los cuerdos yo estoy loco.

Por qué si el mal lo hacen ellos, a mí me quieren internar
porque saben que yo puedo, cambiar la sociedad.

Dejen que los locos crezcan, déjenos vivir en paz
no nos impongan sus leyes, que los locos algún día
nos vamos a levantar y viviremos nuestras vidas
bien, bien locos.

Loco, si esos son los cuerdos yo estoy loco.

//www.youtube.com/watch?v=kg12zxkoRtI

 

 

…