A los jóvenes blancos

Por la presente queremos hacer público el sentir de un pequeño grupo de wilsonistas pero que, sin embargo, creemos que es el sentir de muchos más. Nos referimos al uso y abuso que se ha hecho de la figura de Wilson Ferreira Aldunate por parte de quien estuvo en las antípodas de su pensamiento y conducta en el Partido Nacional. No importan nuestros nombres, sí lo que sentimos. La mayoría de nosotros nunca ocupamos cargos de relevancia pero siempre estuvimos muy cerca del Movimiento y de Wilson. Algunos, por cuestiones de edad, estamos ya medio retirados. Nunca hemos tenido ni tenemos hoy ninguna pretensión de ningún tipo. Eso y el viento de libertad que siempre nos inspiró Wilson nos lleva a expresarnos sin buscar protagonismo personal pero sin abdicar de lo que sentimos. Somos y seguiremos siendo blancos, del Partido Nacional, de Por la Patria y de Wilson. Por lo tanto hemos votado al Partido Nacional, como corresponde. Somos y seguiremos siendo blancos. Pero más que nuestro futuro, que es breve, nos importa el de nuestros jóvenes y el del Partido, que esperamos sí crezcan junto a la patria. Por eso nos resulta imperioso éticamente hacer algunas puntualizaciones que hasta ahora habíamos preferido mantener en prudente silencio. Nos avergüenza la campaña publicitaria que en nombre del Partido Nacional alguien ordenó y pagó sin que ninguna autoridad pegase el grito en el cielo, como lo hubiera hecho Wilson. Wilson jamás hubiera permitido una bajeza de ese tipo. Jamás.

Eso no es digno de nuestro partido. Por eso abandonamos nuestro prudente silencio. Queremos que nuestros nietos sigan siendo blancos, que no sientan vergüenza. Lo que se ha hecho no es digno del Partido Nacional, no es digno de Wilson. Pero estas sustanciales diferencias de pensamiento y de conducta no son nuevas. Eso es lo que hoy queremos compartir con los más jóvenes.

 

Juntos no es lo mismo que entreverados

Si bien el doctor Lacalle también está dentro del Partido y por elección del soberano es el candidato a la Presidencia de la República, los wilsonistas mantenemos profundas diferencias desde siempre con él. Como las tuvo Wilson y nunca las ocultó.

Por lo tanto, nos desagrada profundamente que se finja una cercanía que nunca hubo. No era necesaria tanta adulonería barata; los wilsonistas nunca dudaríamos en votar a nuestro Partido Nacional, aunque el candidato fuese Lacalle. Y así lo hicimos. La historia es muy clara e inequívoca en cuanto a lo que Wilson siempre fue capaz de entregar por el país y por el Partido.

Lo que sí nos subleva es que se mienta y que para los jóvenes quede como que eran «casi lo mismo».

En aras de la verdad histórica que Wilson, el país y los jóvenes merecen, relatamos algunos acontecimientos que para la mayoría de los dirigentes y allegados nacionalistas de la época son bien conocidos y «comentados» y que por obvias razones de edad los jóvenes de hoy necesitan conocer para que les quede claro que hay otra manera de ser blancos y que nos llena de orgullo. Estos hechos que vamos a relatar muestran, de forma inequívoca, que podemos andar juntos pero no entreverados.

 

Elecciones del 71

El sábado antes de las elecciones, en plena veda electoral, varios ciudadanos colorados organizan una caravana por la democracia, o como se dice ahora, blanquicolorada. El único blanco que adhiere a ella es Lacalle. Impera la confusión. Guerra fría, temor, muchos «por la patristas» participan con sus banderas. A otros (coches con distintivos colorados) les ponen banderas de Por la Patria. Wilson, enterado y a un riesgo electoral tremendo, sale a la esquina de Avenida Brasil y la Rambla a arrancar todas las banderas suyas que desfilan.

 

Escrutinio

Cuando Wilson impugnaba el resultado de las elecciones del 71, Lacalle dijo: ganó la democracia; y Wilson respondió: «El que votó por mí no votó por el Partido Colorado. Eso de que ganó la democracia es un cuento chino.»

 

Bordaberrato

Durante la agonía democrática Lacalle integra el grupo de ciudadanos blancos que acepta ministerios desoyendo la resolución del Directorio del Partido. A la salida de la sesión del Directorio, Wilson responde diciendo: «Nosotros sabemos que hay blancos baratos que se quieren vender».

 

Franco

Wilson nunca fue a España hasta su muerte. El principal tema de discusión de siempre fue éste. El 20 de noviembre de 1975 muere Franco; Wilson está en México. El 25 llama por teléfono Fernando Oliú a contar que se había abierto un libro de condolencias en la embajada y que Lacalle, antes de entrar a la misma, se detuvo, extendió su brazo derecho y cantó «Cara al Sol» (himno franquista).

 

Toba

A fines de 1975, a raíz de la participación de Toba en un seminario en Argentina organizado por Jorge Abelardo Ramos, Lacalle escribe en ‘El País’, donde «lo reta» por haber participado y remata con la frase de Herrera: «Orientales nada más».

 

Toba 2

La reacción de Wilson es bastante más dura que la del propio Toba. En rigor el Toba era un gran conciliador y Wilson decide cortar completamente con Lacalle.

 

La convergencia

El 20 de abril de 1980 se funda la Convergencia Democrática en Uruguay. Juan Raúl Ferreira era su presidente y Carlos Martínez Moreno el secretario general. Wilson fue su inspirador. El 20 de mayo, en homenaje a Toba y Zelmar se realiza su primer acto público en México. Wilson manda un mensaje: «La mejor manera de homenajear a Toba y Zelmar es unirnos en la lucha de la causa a la que ellos entregaron sus vidas». La CDU tenía ya un mes de vida. Este último mensaje genera una respuesta de Lacalle en el diario «El País» que decía: «Desde el exterior se agita una coalición frenteamplista de supuesta participación blanca. Es incompatible la condición de blanco con la de integrante de la Convergencia.

 

Triunvirato

A poco de empezar la lucha antidictadura, el presidente del Directorio del Partido Nacional, capitán de navío Homar Murdoch, es procesado. Como consecuencia de ello se forma la Comisión de Asuntos Políticos del Directorio (conocido como el Triunvirato), que se convirtió en el órgano de conducción del Partido. Lo integraba Carlos Julio Pereyra )Movimiento de Rocha), Dardo Ortiz (PLP) y Mario Heber (Herrerismo). En mayo de 1980 muere Mario Heber y Lacalle pide para ocupar su lugar. Wilson lo veta a tal punto que queda el lugar vacante hasta que el Herrerismo acepta la propuesta de Wilson de nombrar a Jorge Silveira Zavala.

 

Plebiscito

En 1980 también se convoca a votar la reforma constitucional de los militares. El triunvirato ya integrado por Siveira Zabala convoca a votar por NO. Lacalle, despechado, se reúne con Johnny Payssé (ex secretario de Wilson, asesor del Goyo y actual presidente de la Comisión de Hacienda de la campaña de Lacalle) y decide votar SI y lo hace público por CX8 Radio Sarandí. El profesor Pivel Devoto, tal como lo relatara hace pocas semanas el doctor Zumarán, le presiona para que desista. Finalmente la determinación de Raumar Jude de votar por NO, contra la opinión de Pacheco en el Partido Colorado, lo obliga a recapacitar y termina haciendo una tímida definición por el NO.

 

Elecciones internas

En las mismas Wilson promueve ACF para unir los sectores Por La Patria y Movimiento Nacional de Rocha. Lacalle, que notoriamente nunca perteneció a ninguno de los dos, pidió el tercer lugar en la lista, a lo que Wilson se negó rotundamente.

 

Bajada de Wilson

Ya en la campaña para las elecciones de 1984, Lacalle quiere «subirse al ómnibus», esto es, hacer la misma campaña proselitista que el Movimiento de Rocha y Por la Patria. Wilson, desde Trinidad, indica: «Es lo mismo que las internas. Si quiere votar a Zumarán, no se lo podemos prohibir. que haga su propia gira y su propia campaña». Lacalle no se conforma y quiere cobrar un precio por este rechazo. A ese episodio él le emp
ieza a llamar «bajada de ómnibus»; luego lo dramatiza subiendo y «haciéndose bajar» del ómnibus, a donde dijo haber ido a despedirse.

 

Muerte de Wilson

Tras la reunión de Directorio del Partido en la cual se planea el funeral, él se retira diciendo: «Disculpen, igual el muerto es de ustedes». Alguno de los que escribimos esta carta estaba allí en ese momento y no lo hemos podido olvidar.

¡Viva Wilson! ¡Viva el Partido Nacional!

Amigos de Fernando Oliú

Publicá tu comentario

Compartí tu opinión con toda la comunidad

chat_bubble
Si no puedes comentar, envianos un mensaje