1.100 delfines han aparecido muertos en playas de Francia en tres meses
Las muertes masivas han alarmado a los grupos ambientalistas, quienes dicen que las propuestas para ayudar a salvar a los delfines no son suficientes.
Una crisis de delfines apareciendo muertos en playas de Francia parece ser causada por un culpable, a donde apuntan todas las pruebas: la pesca industrial.
En el primer trimestre de 2019 se han encontrado más de 1.100 delfines muertos en playas de ese país, la mayoría de ellos mutilados por elementos relacionados con la pesca.
Las muertes masivas han alarmado a los grupos de bienestar animal y han logrado que ministro de ecología francés, Francois De Rugy, lance un plan nacional.
Los activistas dicen que los pescadores a menudo cortan partes del cuerpo de los delfines asfixiados después de que son arrastrados en sus redes, en un intento por salvar sus equipos y botines de pesca.
El ministro De Rugy, bajo presión del presidente Macron y de la sociedad civil, se ha comprometido a reforzar investigaciones sobre las técnicas que usan los pesqueros industriales, que deberían estar usando dispositivos y redes especiales para evitar que los delfines queden atrapados y mueran ahogados.
No se hace lo suficiente
Hay alarmas repelentes que, cuando se activan, envían sonidos que son desagradables para los delfines y los alejan para salvar sus vidas, pero muchos pesqueros de medio y gran porte se niegan a invertir en este tipo de sistemas porque, básicamente, les parece un gasto innecesario. Es más fácil deshacerse de los delfines muertos por la borda.
La organización ambientalista Sea Shepherd asegura que las medidas no van lo suficientemente lejos, afirmando que muchos pescadores se muestran reacios a usar los dispositivos repelentes porque consideran que pueden asustar también a los peces valiosos.
La ONG también sostiene que aumentar la cantidad de este tipo de dispositivos no es una solución a largo plazo, ya que convierte a los océanos en un ambiente sumamente contaminado por ruido y los vuelve inhabitables para muchas especies. «El gobierno debe asumir la responsabilidad y actuar, especialmente Macron, quien dijo que quería proteger la ecología», dijo Lamya Essemlali, representante de Sea Shepherd.
Una de las formas de pescar más nocivas es la pesca de arrastre, que consiste en soltar kilómetros y kilómetros de redes que luego se recogen para atrapar todo lo que se pueda, porque el mundo está cada vez exigiendo peces de bajo costo, no importa su calidad.
Compartí tu opinión con toda la comunidad