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El «Bosque Trump»: Un millón de árboles para contrarrestar los desastres ambientales del gobierno de EE.UU.

Este proyecto de reforestación global apunta a contrarrestar las políticas anti climáticas del presidente Trump y ya ha alcanzado 1 millón de árboles sembrados en todo el mundo.

Foto: Pixabay
Foto: Pixabay

El Bosque Trump (Trump Forest) se lanzó hace poco más de un año después de que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunciara que sacaría a los Estados Unidos del Acuerdo de París.

«Gracias a las cientos de miles de personas han prometido más de un millón de árboles en todo el mundo para tratar de compensar esa ignorancia», dijo Adrien Taylor, uno de los tres fundadores del proyecto, en un mensaje de video que anunciaba el hito. «Al hacerlo, no solo se compensó algunas de las emisiones de carbono que surgieron de la administración Trump, sino que también ayudó a reforestar comunidades, y ayudó a crear un pequeño resquicio de esperanza en la nube oscura de la ignorancia que está en la Casa Blanca», agregó.

La idea detrás del proyecto es simple. «El presidente Trump, no cree en la ciencia del cambio climático, que afirma que es causado por los humanos. Quiere ignorar una de las mayores amenazas para vida en la Tierra», dice el sitio web del proyecto.

 

La insistencia de Trump

«Quiere traer de vuelta el carbón a pesar de que los científicos le siguen diciendo que no nos lo podemos permitir y de que los economistas insisten en que habría más dinero y más empleo en la industria de las energías renovables», continúan estos ambientalistas.

El bosque no tiene una sola ubicación física. Por el contrario, cualquiera que quiera participar en el proyecto puede plantar árboles en cualquier parte del mundo en nombre de Trump. Una vez hecho esto, envíe al grupo una confirmación para que la contribución se agregue al mapa global del Trump Forest. También puede donar directamente al socio del Trump Forest, Eden Reforestation Projects, una organización sin fines de lucro que trabaja en países en desarrollo para reconstruir paisajes naturales destruidos por la deforestación.

El objetivo de los organizadores es bastante más ambicioso: plantar 10 mil millones de árboles, para compensar el dióxido de carbono que se liberaría en la atmósfera si la administración Trump continuara haciendo retroceder las regulaciones ambientales y presionando por el uso de combustibles fósiles.

 

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