ONU en el Día Internacional para Prevención de Explotación del Medio Ambiente en la Guerra

Las Naciones Unidas conmemoran cada 6 de noviembre una de las fechas oficiales con un título tan extenso que más parece una explicación: el Día Internacional para la Prevención de la Explotación del Medio Ambiente en Guerra y los Conflictos Armados.

El tema podría incluso parecer de segundo orden en tanto, el medio ambiente se recuperará –si lo dejan- pero no se recuperarán ni las vidas humanas, ni las minusvalías, ni los hogares volverán jamás a ser los mismos, después de una guerra. Sin embargo el aspecto medular del asunto es que la jornada recuerda no solamente las consecuencias de las guerras, sino las causas de casi la mitad de los conflictos bélicos desatados en el mundo.

Según el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), en los últimos 60 años “al menos el 40% de los conflictos internos han tenido alguna relación con la explotación de los recursos naturales, tanto por ser considerados de «mucho valor», como madera, diamantes, oro, minerales o petróleo, como por ser escasos, por ejemplo, la tierra fértil y el agua”.

La dependencia de ONU recuerda además en www.un.org/es/events/environmentconflictday/, que “cuando se trata de conflictos relativos a los recursos naturales se duplica el riesgo de recaer en el conflicto”.

La ONU aspira garantizar la actuación medioambiental para mantener la paz

“No puede haber paz duradera si los recursos naturales que sostienen los medios de subsistencia y los ecosistemas son destruidos”, puntualiza ONU que prioriza garantizar la actuación sobre el medio ambiente como parte de la prevención de conflictos y el mantenimiento de la paz.

El Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki-moon ha puntualizado para la conmemoración 2014, que “el medio ambiente es desde hace mucho tiempo una víctima silenciosa de la guerra y los conflictos armados. Desde la contaminación de la tierra y la destrucción de los bosques hasta el saqueo de los recursos naturales y el colapso de los sistemas de ordenación, las consecuencias ambientales de la guerra son a menudo generalizadas y devastadoras”.

Remarcó en tal sentido, la necesidad este año “de proteger el medio ambiente contra los efectos de la guerra y prevenir futuros conflictos por los recursos naturales. Esos desafíos son aun más urgentes ahora que la comunidad internacional está formulando la agenda para el desarrollo sostenible después de 2015”.

La ONU se encuentra preparando la primera guía para la mediación de los Recursos Naturales en las situaciones de conflictos, una de las prioridades documentales en esta línea de acción.