Veneno de las arañas sería solución a la desaparición masiva de abejas en el mundo
El veneno de una de las tarántulas más venenosas conocidas junto con proteínas de una variedad de flores de narciso, serían la solución para la desaparición de las abejas en el planeta.
Científicos de la Universidad de Newcastle, en Gran Bretaña, han encontrado una solución “alternativa” al uso de los neonicotinoides, químicos empleados como control de plagas que están liquidando también a las abejas con consecuencias aún desconocidas, pero no poco atemorizantes.
El HV1a/GNA es una fórmula lograda a partir del veneno de arañas de la variedad hexathelidae, los cuales combinados con extracto del “jacinto de las nieves”, aseguran un pesticida que no afecta en forma significativa ni a las abejas adultas ni a las larvas. Los efectos hasta ahora son casi indetectables en las colonias, dice el informe que publica la revista científica Proceedings of the Royal Society .
Crece la preocupación científica en tanto disminuyen los panales
La disminución cada vez más rápida de las colonias de abejas en todo el mundo es una de las preocupaciones científicas más importantes del momento, en tanto se entiende que si el 90% de las plantas del mundo dependen de la polinización, y los químicos están matando las abejas, en un tiempo indeterminable con exactitud, pero seguramente breve, no habrá biodiversidad, ni plantas que proteger.
El “Trastorno del Colapso de las abejas” que se registra en el mundo desde hace una década y media, apunta que en los últimos 7 años ha desaparecido el 30% del total de abejas que se estimaba había en el mundo. A la fecha solo algunos países europeos han prohibido el uso de algunos de los más peligrosos pesticidas neonicotinoides.
Los científicos apuntan también que el fenómeno es multicausal, y otros factores como plagas animales, monocultivos, hongos parásitos, también están incidiendo en el fenómeno.
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