Coelho desató la huida de los hinchas de Danubio

Pintaba lindo el partido en el comienzo para Danubio pero el final fue 4-1 a favor del Club Nacional de Football. El cuarto gol tricolor convertido por el artiguense Walter Fabián Coelho en una definición espectacular, desató la bronca de los hinchas de Danubio de la Tribuna Colombes y la mayoría de los parciales se retiraron del Estadio Centenario. Algunos parciales danubianos se fueron del Centenario cuando el atacante Ignacio Risso erró el penal.

Hubo un gran dispositivo de seguridad dentro y fuera del Estadio Centenario. La guardia policial intentó poner orden para que no se repitiera algo similar a lo ocurrida en el pasado clásico del fútbol uruguayo en el que Nacional derrotó a Peñarol por 4-2.

Además la Jefatura de Policía de Montevideo, en un comunicado que se pasó por los altoparlantes del estadio, decía que estaba prohibido quemar papeles.

 

A la salida del Estadio Centenario varios hinchas de Nacional festejaron la goleada y cantaron contra el equipo danubiano.

Una persona de unos sesenta años de edad, hincha de Danubio, se «calentó» y comenzó a replicarle contra esos parciales de Nacional.

«Â¡Hace 15 años que les venimos ganando en Jardines y por eso no quieren ir a jugar!», replicó a los gritos esta persona. Varios hinchas de Nacional se acercaron a esta persona y le pidieron que se callara la boca porque podría haber problemas.

 

Por cábala los futbolistas de Nacional vistieron ayer todos de blanco. Pero el próximo miércoles en la segunda final por el Campeonato Uruguayo los futbolistas vestirán camiseta roja, pantalón y medias blancas. Nacional siempre utiliza para jugar los encuentros la clásica casaca blanca con pantalón y medias azules.

 

Como es de costumbre en el vestuario de Danubio previo a cada partido los futbolistas escuchan música tropical. Es una cábala que tienen los jugadores en cada encuentro.

 

La Copa Uruguaya 2004 estuvo al costado de la cancha del Estadio Centenario. Cabe recordar que si Danubio ganaba el cotejo se iba a consagrar campeón del balompié uruguayo.

 

Danubio demuestra en el fútbol juvenil que predomina. Ayer el conjunto franjeado ganó los campeonatos Uruguayos en Sexta y Séptima División. Esto se suma al Uruguayo ganado en Cuarta División y el Campeonato Nacional Sub 16.

 

La Comisión Directiva del Danubio Fútbol Club, continuando con la política de que la mayor cantidad de hinchas participaran de la fiesta resolvió que 2.500 danubianos que fueron a la Tribuna Colombes y portaran algún distintivo que los identifique como tales (como ser sombrero, gorro, camiseta o bandera), ingresaron gratis. Fue una buena medida del presidente del club Arturo del Campo.

 

El minuano Washington Sebastián Abreu es sin dudas el gran ídolo de Nacional por su adhesión a la camiseta de sus amores. Sobre el final del partido la hinchada de la Tribuna Amsterdam coreó el clásico «Â¡Locoooo, Locoooo!»

 

Los jugadores de Nacional se juntaron ayer por la tarde en el Hotel Palladium. El primero en llegar fue el «Loco» Sebastián Abreu. Los futbolistas merendaron, escucharon la charla técnica del entrenador Hugo Eduardo De León y partieron con destino al Estadio Centenario.

Los futbolistas mantienen la medida de no concentrar debido al atraso en los pagos de los salarios.

 

A los 12 minutos del primer tiempo el tricolor Federico Rariz le pidió agua a la sanidad de Danubio. Rariz tiene buena relación con la institución porque cabe recordar que inició su carrera futbolística en la institución de la Curva de Maroñas.

Es la primera vez que el arquero de Nacional, Sebastián Viera, le gana a su padre. El padre Mario Viera es ayudante de Gerardo Pelusso en el equipo danubiano.

 

Como todo uruguayo, minutos antes de comenzar la final hubo largas colas en las boleterías y las puertas del Estadio Centenario. Mucho público ingresó al estadio con el partido ya comenzado.

 

Cerca del final del primer tiempo Alberto Silva recibió una dura infracción del capitán danubiano Omar Pouso. Silva reaccionó y encaró a Pouso, pero el problema no pasó a mayores porque el resto de los futbolistas separó.